Importancia de la hidratación: ¿Por qué tomar agua?

El cuerpo humano está compuesto por un 60% de agua. Representa tres cuartas partes del cerebro y del corazón, y más del 80% de los pulmones. ¿Sabés la importancia de la hidratación? 

30 de junio, 2021 | 10.36

Todos sabemos que se trata del hábito saludable más simple de todos. Tan simple, que a veces nos olvidamos y hasta nos cuesta hacerlo. Pero hay que hacer un esfuerzo por incorporar la costumbre. Tomar agua es fundamental para nuestra salud.

El cuerpo humano está compuesto por un 60% de agua. Representa tres cuartas partes del cerebro y del corazón, y más del 80% de los pulmones. 

Servite un vaso y ponete cómodo: te contamos todo sobre la importancia de la hidratación. También te recomendamos este video que explica la relación de este recurso fundamental con nuestra salud.

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Importancia de la hidratación: beneficios

Todos escuchamos más de una vez sobre la importancia de la hidratación. Se dice que tomar agua es fundamental para nuestro organismo y que adquirir el hábito resulta ampliamente beneficioso. Pero, ¿cuáles son esos beneficios?

 

A continuación te mencionamos algunos, pero no te olvides. La importancia de la hidratación es vital y supera cualquier lista de ventajas que podamos confeccionar.

 

Piel linda

Tomar agua en cantidad es la primera recomendación de los dermatólogos. La hidratación está directamente vinculada con la elasticidad de la piel y a la recomposición de los tejidos dañados. 

Más energía

Parece mentira, pero la deshidratación es muy frecuentemente la causa de la fatiga. ¿Por qué? Porque el agua es el vehículo a través del cual nuestro cuerpo elimina toxinas. 

El agua le da oxígeno a nuestras células y también recoge los residuos de los pulmones para su eliminación. Es decir, nos limpia. Un organismo libre de toxinas funciona con mayor facilidad. 

Además, la deshidratación afecta al cerebro. Se traduce en una mayor demanda a cada una de sus funciones. Tomando suficiente agua no malgastamos la energía que necesitamos para vivir nuestro día con normalidad.

Digestión sana

Tomar agua con suficiente frecuencia acelera el metabolismo. Esto facilita la digestión, que de lo contrario se vuelve lenta y dificultosa. Una persona suficientemente hidratada difícilmente sufra de estreñimiento.

Reducción de riesgos

El hábito de tomar agua en cantidades suficientes reduce el riesgo de contraer cáncer de colon y de vejiga. Además, fortalece el sistema inmunológico, previniendo todo tipo de enfermedades.

 

El hábito de tomar agua en cantidades suficientes reduce el riesgo de contraer cáncer de colon y de vejiga.

Pérdida de sobrepeso

El agua es aliada de las dietas para bajar de peso, porque genera sensación de saciedad. Además, ayuda a eliminar los subproductos de la grasa.

 

Síntomas de deshidratación: así reacciona tu cuerpo

Ya te comentamos algunas molestias simples que podés evitar tomando suficiente agua, como el cansancio o el estreñimiento. Pero la importancia de la hidratación va más allá.

¿Qué le pasa a tu cuerpo cuando está escaso de líquidos? Leé esta serie de síntomas. Te va a dar sed.

Halitosis o mal aliento

La importancia de tomar agua para prevenir o combatir el mal aliento es fácil de explicar. Cuando estamos deshidratados, uno de los mecanismos de nuestro cuerpo para retener el agua que contiene, es disminuir el flujo de saliva.

 

Resulta que el nivel de halitosis es inversamente proporcional a dicho flujo. La falta de saliva en la boca tiene como consecuencia la acumulación de restos de alimentos entre los dientes.

 

Por otro lado, la saliva se acidifica, lo cual facilita el sobrecrecimiento bacteriano. La halitosis es, en realidad, la más inmediata de consecuencias más graves para la salud bucal. También se corre el riesgo de desarrollar caries y periodontitis.

Piel seca

La piel es el órgano más grande del cuerpo humano y necesita de una correcta hidratación, al igual que todos los demás. La diferencia es que está a la vista.

 

El uso de cremas humectantes e hidratantes ayuda, pero no es suficiente. La piel seca es un síntoma de que el cuerpo está necesitando más agua del que está recibiendo. 

Irritabilidad

A veces cuesta creer que nuestro estado de ánimo se deba a cuestiones orgánicas, pero es así. La falta de agua provoca no solo somnolencia, sino también tensión y mal humor. 

La deshidratación leve provoca somnolencia, tensión y mal humor.

 

En el año 2015, una investigación realizada en la Universidad de California hizo una investigación sobre el consumo de agua. El estudio, publicado en la revista Plos One, demuestra que la mayor o menor ingesta de agua tiene consecuencias inmediatas en el ánimo de las personas.

Mareo y/o dolor de cabeza

Tomar agua es el primer y más natural remedio al dolor de cabeza. Muchas veces, ante la molestia, no dudamos en tomar un medicamento, sin antes verificar que no se trate simplemente de falta de agua.

 

Dependiendo del nivel de deshidratación que se sufra, el síntoma puede ser tanto un dolor de cabeza leve como una migraña. ¿Sabías que, ante la falta de líquido, el cerebro se contrae? 

 

Por muy impresionante que suene, es un mecanismo absolutamente común que sirve para ilustrar la importancia de la hidratación. Cuando el cerebro está deshidratado, se encoge y se separa del cráneo, lo cual genera dolor. 

 

El dolor de cabeza provocado por deshidratación suele ser acompañado por otros síntomas. Algunos de estos son:

  • Mareo

  • Fatiga

  • Presión baja

  • Aumento de la frecuencia cardíaca

  • Orina escasa y de color oscuro

  • Sed.

 

¿Qué pasa si no tomo agua?

No tomar agua obliga a nuestro cuerpo a modificar su funcionamiento en pos de desacelerar las consecuencias de la deshidratación. ¿Cómo lo hace? Resguardando por más tiempo el agua que contiene.

 

Esto sucede a partir de la secreción de una hormona llamada argipresina, conocida como “la hormona antidiurética”. A través de la producción de acuaporinas, una proteína de membrana, la sangre comienza a retener más agua de lo normal.

 

Como consecuencia de este proceso, se reducen las ganas de orinar y se disminuye la segregación de saliva. La orina se vuelve más oscura de lo normal y su olor es más fuerte. 

 

Cada aspecto de nuestro organismo se encuentra condicionado por la deshidratación, por más leve que sea. En este estado son esperables los síntomas que mencionamos más arriba.

¿Realmente debo beber 2 litros de agua al día?

Lo cierto es que no hay evidencia de que sean exactamente 2 litros la ingesta de agua conveniente para todo el mundo. Pero, si bien no hay una indicación universal, la comunidad científica emite sus recomendaciones. 

 

Los hombres deberían consumir aproximadamente 3 litros de agua diarios y las mujeres, 2. Esta diferencia está basada en las diferencias estandarizadas de peso y volumen corporal.

Los hombres deberían consumir aproximadamente 3 litros de agua diario y las mujeres, 2 litros.

Como dijimos, estas cantidades aconsejables varían según el caso. Entre las personas que necesitan una mayor cantidad de agua se encuentran las mujeres embarazadas o lactantes. 

 

Los bebés también necesitan consumir mucho líquido, ya que se deshidratan fácilmente con diarreas o vómitos. Asimismo, los niños deberían tomar cantidades suficientes de agua, debido a que sufren menos sed.

 

Las condiciones climáticas también impactan en el cuerpo. El calor genera en el cuerpo una mayor demanda de agua. Lo mismo sucede con la actividad física debido a la sudoración.

 

Con frecuencia las personas mayores tienden a la deshidratación, por alteraciones en el mecanismo de la sed. A esto se suma la ocasional dificultad de deglución. Hay que estar atentos. Por otro lado, cuando se está enfermo, es conveniente beber más agua de lo normal. 

 

La recomendación para quienes encuentran difícil tomar agua suficiente es agregarle limón, antes de reemplazarlo por otro tipo de bebidas. El cítrico le da un toque de sabor sin implicar un consumo innecesario de azúcar. 

¿Cómo saber si estoy bien hidratado?

Existe una manera muy simple de evaluar si estamos suficientemente hidratados. Podés hacerlo ahora mismo. Se hace evaluando la turgencia cutánea, es decir, la elasticidad de la piel.

 

Tenés que pellizcar el dorso de tu mano por un segundo. Fijate qué pasa con la piel ¿vuelve rápido a su lugar o se demora en hacerlo?

 

El primer caso es indicador de que todo está en orden. De lo contrario, si la piel tarda en recuperarse del pellizco, es signo de deshidratación moderada o grave.

 

Peligros de beber demasiada agua

Dado que la tendencia es tomar menos agua de lo indicado, se suele hacer hincapié en que necesitamos hidratarnos mejor. ¡Pero cuidado! Tomar demasiada cantidad también puede resultar perjudicial para la salud.

Los peligros de beber agua en exceso son reales. No se deberían superar los cuatro litros diarios. La excepción sería encontrarse en un lugar extremadamente caluroso o realizando una cantidad de ejercicio considerable. ¿Cuáles son los riesgos?

Una de las consecuencias de la hiperhidratación es el la decaída de sodio en sangre. Este trastorno se llama hiponatremia.

Afecta especialmente al cerebro y puede causar una serie de síntomas clínicos. Entre ellos encontramos confusión, fatiga, convulsiones, dolor de cabeza, inapetencia, náuseas, vómitos, debilidad muscular y calambres.

 

Sin apurarse

 

Además, es importante cuidar el modo de beber. En este sentido, el consejo es el mismo que con la comida: ingerir despacio, sin apuro.

 

Al hacer ejercicio físico, por ejemplo, puede que la sed sea particularmente fuerte. Aún ante las ganas de tomarse la botella entera, es conveniente hacerlo de a sorbos pequeños. De lo contrario, podemos sufrir molestias gastrointestinales. 

 

¿Por qué se recomienda beber agua en ayunas?

Ya conocemos los beneficios que el agua ofrece a nuestro cuerpo y entendemos la importancia de la hidratación. Ahora, ¿es cierto que tomar agua apenas nos levantamos es bueno para la salud?

La respuesta es sí. Tomar uno o dos vasos en ayunas es una práctica muy recomendable. Te contamos por qué.

En primer lugar, es una manera de activar el metabolismo apenas comenzamos el día, para que siga funcionando a lo largo de la jornada. En segundo lugar, como ya sabemos, el agua ayuda a eliminar toxinas.

Un vaso de agua a la mañana nos ayudará a minimizar los efectos de sustancias que podemos haber consumido el día anterior, como alcohol, grasas o tabaco. Además, la estimulación del movimiento intestinal previene el estreñimiento mientras reduce la acidez estomacal. 

Por otro lado, genera cierta sensación de saciedad que puede ayudar a aquellas personas que amanecen con mucha hambre. Luego habrá que desayunar, en la justa medida. ¡Eso sí! Es conveniente esperar al menos diez minutos antes de hacerlo.

Alimentos que te mantienen hidratado

Por regla general, los alimentos que más agua contienen son las hortalizas y frutas. Por el contrario, las galletas, las legumbres y el arroz son los últimos en la lista.

 

Los alimentos ricos en agua son una gran ayuda para mantenernos hidratados. Sus propiedades diuréticas ayudan a prevenir o disminuir la retención de líquidos y a regular la presión arterial. También facilitan la digestión y alivian el estreñimiento.

 

Aquellos que son ricos en agua y fibra, como las frutas y verduras, son los mejores para el funcionamiento intestinal. En cambio, alimentos como los cítricos y frutos de mar, contienen agua y sales minerales, lo cual ayuda a evitar calambres y combatir la fatiga.

 

A continuación, te comentamos cuáles son los alimentos que más agua contienen, para que los tengas en cuenta al pensar tus comidas. Como platos principales o acompañamientos, incorporarlos a tu dieta diaria te ayudará a mantenerte hidratado.

 
  • Lechuga: 95,9 g de agua cada 100 g

  • Rabanito crudo: 95,6 g de agua cada 100 g

  • Pera: 95,1 g de agua cada 100 g

  • Sandía: 93,6 g de agua cada 100 g

  • Tomate crudo: 93,5 g de agua cada 100 g

  • Zanahoria cruda: 92 g de agua cada 100 g

  • Coliflor cocido: 92 g de agua cada 100 g

  • Melón: 91,8 g de agua cada 100 g

  • Frutilla: 90,1 g de agua cada 100 g

  • Limón: 90,1 g de agua cada 100 g

  • Clara de huevo: 87,4 g de agua cada 100 g

  • Naranja: 86,3 g de agua cada 100 g

  • Pepino: 86,3 g de agua cada 100 g

  • Manzana: 83,8 g de agua cada 100 g

  • Banana: 72,1 g de agua cada 100 g.

Conclusión

No es una metáfora decir que somos, esencialmente, agua. Más de la mitad de nuestro cuerpo está conformado por ella. 

Tomar agua a diario y en las cantidades indicadas es absolutamente necesario para mantener un cuerpo sano. Incluso sirve para nuestro espíritu: sabemos que beber suficiente agua nos ayuda a combatir el mal humor.

Comenzar en ayunas y tener siempre una botellita cerca son buenos hábitos fáciles de adquirir. ¡Y no te olvides de incluir alimentos ricos en agua en tu dieta! Para aprender más sobre salud y alimentación, seguí leyendo El Destape.