Al dolor de una extracción de muela se le suma el dolor de tener que esperar para volver a comer lo que más se disfruta. Inevitablemente se complica cuando hay una herida abierta y, en algunos casos, todavía sangrando tan cerca de alimentos, que pueden provocar un aumento del sangrado, retrasar la cicatrización o incluso causar una infección.
Para no complicar por demás la cicatrización de la herida y poder volver a comer lo más pronto posible es necesario respetar el tiempo necesario para que pare de sangrar. Además, después de la intervención la boca suele permanecer anestesiada por bastante tiempo. Aunque pueda parecer gracioso también es peligroso.
Si se ingieren alimentos apenas concluye la extracción la persona corre el riesgo de morderse la lengua sin sentir el dolor y sumar otra herida abierta. Es necesario ser cuidadoso o cuidadosa con lo que se ingiera después de la operación. Incluso tampoco se puede fumar en las primeras dos semanas posteriores.
Alimentos que se deben evitar
Lo primero que hay que evitar comer después de una extracción de muela son los productos picantes, ya que son muy irritantes y perjudican la zona. El alcohol es otra de las sustancias que deben limitarse durante los días posteriores a la cirugía dental.
Los alimentos que incluyen semillas pequeñas también hay que dejarlos fuera de la dieta durante los días de recuperación de extracción de muela. Esto se debe a que pueden introducirse en la zona afectada y provocar complicaciones. Por lo tanto, nada de cereales, frutas ni semillas pequeñas.
En conclusión, mantener una dieta adecuada tras una operación de extracción de muela es fundamental para una recuperación rápida. La motivación más importante es evitar una infección, por lo que es muy importante que durante esos días posteriores apostar por una dieta nutritiva que fortalezca las defensas.
Cuándo se puede volver a comer después de la extracción
El primer día se deben evitar comer después de una extracción de muela los alimentos calientes ya que el calor causa vasodilatación y por lo tanto favorece el sangrado. Se debe comer por lo tanto alimentos fríos o templados. Algunos alimentos adecuados son yogures y helados. La clave está en que son blandos y fríos. Una vez establecida la correcta coagulación, a partir de las 24 horas, es posible comer alimentos a cualquier temperatura.
Instintivamente el paciente evitara masticar por la zona de la extracción. Aún así, se recomienda llevar una dieta blanda o semisólida durante los primeros días. Los alimentos duros podrían enclavarse en la zona intervenida y causar dolor o que vuelva a sangrar. Algunos alimentos adecuados son sopas, cremas, arroz, tortilla, verdura hervida, etc.
Una vez pasados estos primeros días, se puede comer después de una extracción de muela, pero siempre cuidando que sean alimentos fáciles de masticar y que no se acumulen en la zona afectada. También se debe elegir alimentos fríos, ya que ayudarán a desinflamar la zona y a que cicatrice más rápidamente.
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