Vuelven las olas de calor y esta semana se esperan altas temperaturas en varias provincias a lo largo y ancho del país. Se trata de la primera ola de calor de este verano, que llega más tarde por el efecto del fenómeno de El Niño, según explicaron desde el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
De acuerdo a un informe publicado por la revista Lancet, estas olas son cada vez son más frecuentes e intensas. Ante este panorama, especialistas del Hospital de Clínicas de la UBA alertan sobre el impacto de este fenómeno y elaboraron un listado de recomendaciones a tener en cuenta para evitar un golpe de calor.
Este fenómeno “ha puesto en riesgo cada vez más la salud y la supervivencia de los niños menores de un año y de los adultos mayores de 65 años”, advierten los profesionales de la salud.
Una por una, las recomendaciones para evitar un golpe de calor
- Mantener una hidratación adecuada: se recomienda que un adulto sano consuma 2,5 a 3,5 litros de agua por día, de acuerdo a su género y talla.
- Buscar lugares frescos y preferir espacios verdes. Caminar por la sombra ya que hay hasta 3 grados de diferencia con respecto al sol.
- Evitar horarios donde el sol es más fuerte: evitar la exposición entre las 11 y las 16 horas
- Consumir frutas y vegetales y evitar azúcares
- Usar gorra o sombrero, anteojos de sol y protector solar. Es conveniente volver a colocarse fotoprotectores al salir del mar o la pileta, y también cada dos horas como mínimo.
- Tratar de disminuir la actividad física. En el caso de sostener el entrenamiento, conviene hacerlo antes de las 9 de la mañana o al bajar el sol. Tomar agua antes, durante y después de la actividad física.
- Utilizar ropa holgada, liviana y evitar fibras sintéticas que se adhieren al cuerpo e impiden la sudoración.
Golpe de calor: síntomas y qué hacer
Las manifestaciones más habituales del golpe de calor son la presencia de temperatura corporal elevada, cansancio, náuseas, vómitos, modificación de la frecuencia cardíaca, dificultad para respirar, enrojecimiento de la piel, pérdida de la conciencia, síncope e inclusive coma. Y pueden darse complicaciones médicas tales como una falla renal o alteraciones respiratorias.
Ante la presencia de estos síntomas o sospecha de golpe de calor, lo primero es contactarse con el sistema de salud. Se debe bajar la temperatura corporal: poner a la persona en un lugar fresco, que puede ser una habitación o un auto con aire acondicionado, o colocarla frente a un ventilador, mojarle la piel con paños o agua fría, y retirar todas las prendas que se pueda. Se debe tratar de rehidratar a la persona, con líquidos fríos, en forma regular, hasta que llega el médico y se arriba al centro de salud.