Después de días de permanencia en el Hospital Nacional de Salud Mental Laura Bonaparte, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) anunció que "no habrá clausuras de servicios, ni cierre del hospital". Así, celebraron que se mantendrán los 612 puestos de trabajo. Desde el Gobierno niegan haber promovido el cierre y aseguran que solo se trata de un "plan de reestructuración" que ya había sido comunicado el viernes.
Fuentes del Gobierno advirtieron a El Destape que "se va a iniciar un plan de reestructuracion" en el hospital para "analizar el funcionamiento del establecimiento integralmente". Esto va en sintonía con el comunicado que la cartera conducida por Mario Lugones había lanzado el viernes, cuando anunció el comienzo de ese "plan de reestructuración". Mientras dure el plan, el hospital no recibirá nuevas internaciones, aunque mantendrá las guardias y las consultas ambulatorias; las nuevas internaciones, por otra parte, se derivarán a hospitales de la Ciudad de Buenos Aires, agregaron en off las fuentes gubernamentales, que enfatizaron: "Nunca se habló de cerrarlo".
"El Gobierno acaba de acordar con ATE que no habrá clausuras de servicios, ni cierre del hospital Laura Bonaparte. Además se garantiza la continuidad de los 612 puestos de trabajo", indicó el secretario general de ATE, Rodolfo Aguiar, en su cuenta de X.
Y agregó: "Nos comprometimos a suspender las medidas de fuerza en el hospital, pero vamos a mantener la convocatoria a marchar el jueves en el Día de la Salud Mental. Siempre lo dijimos: con un gobierno que prioriza el déficit cero por sobre el hambre de los niños y los jubilados y que quiere destruir el Estado, no tenemos que dialogar, tenemos que confrontarlo".
Aguiar: "No había que dialogar, había que confrontar y empiezan a aparecer los resultados"
Después de publicar el mensaje en redes sociales, Aguiar habló en El Destape 1070. "La esperanza empieza a cambiar de bando. Es un triunfo de la lucha de los trabajadores y la comunidad que se movilizó para defender el Hospital Bonaparte", dijo.
"Llegamos a un acuerdo con el Poder Ejecutivo. Garantizan que el Hospital sigue funcionando plenamente, no se clausuran servicios y se mantienen todos los puestos de trabajo", siguió Aguiar y agregó: "Quedó en evidencia que teníamos razón. Con un Gobierno que está decidido a priorizar el déficit cero por sobre el hambre de los niños y jubilados y que quería destruir el Estado, no había nada que dialogar, había que confrontar, y empiezan a aparecer resultados",