Un efectivo de Gendarmería Nacional fue imputado por abuso sexual en perjuicio de una niña de 7 años. El hecho ocurrió en Tartagal, provincia de Salta, y salió a la luz gracias a que una mujer trabajadora sexual presentó unos chats claves para incriminar al gendarme. La madre de la niña también fue acusada como partícipe necesaria de estos delitos, informaron fuentes del Ministerio Público Fiscal de Salta a Télam.
El caso pudo comenzar a investigarse cuando una trabajadora sexual de Buenos Aires dio a conocer un intercambio de mensajes que mantuvo con el acusado, quien quiso comprarle contenido erótico de manera online. Durante su conversación, él le reveló que había abusado de la niña y le propuso volver a hacerlo mientras ella los miraba a través de una videollamada. La mujer le siguió el juego para obtener más información y, finalmente, al entender que no se trataba simplemente de una fantasía y que había habido un delito, lo denunció. El gendarme fue detenido y, posteriormente, imputado.
Con estas pruebas presentadas, la fiscal penal de Violencia Familiar y de Género de Tartagal, Lorena Martínez, imputó hoy al hombre como autor de los delitos de abuso sexual con acceso carnal y abuso sexual gravemente ultrajante en concurso real, en perjuicio de una niña de 7 años.
Según la investigación, el gendarme mantenía una relación sentimental con la madre de la menor y, en ocasión de concurrir al domicilio de ambas, entre los meses de julio y agosto de 2022, habría vulnerado la integridad sexual de la niña con distintos actos, con conocimiento de la progenitora de la menor. Al no contar con la denuncia de la madre, un tutor o representante legal de la menor damnificada, la Fiscalía inició la investigación de oficio, haciendo primar el interés superior de la niña, que se encuentra en situación de vulnerabilidad.
Durante la audiencia, los acusados estuvieron acompañados por un defensor particular y se abstuvieron de declarar, mientras que desde la Fiscalía se solicitó que se mantenga su detención en el caso del acusado y el arresto domiciliario de la mujer, mientras se cumplen numerosas medidas solicitadas para lograr el esclarecimiento de los hechos.
Si sos víctima de violencia familiar o sexual, o sabés de alguien que lo sea, llamá a la línea 137. Es gratuita, nacional y brinda contención, asistencia y acompañamiento las 24 horas, los 365 días del año.