Una nueva jornada de paro se vive en la ciudad de Rosario este martes: todas las líneas de colectivos interurbanos y los taxis suspenderán sus servicios en respuesta a una serie de ataques perpetrados contra unidades de transporte durante la noche del lunes.
En un lapso de apenas 24 horas, se registraron cuatro ataques contra distintos vehículos, que incluyeron disparos, lanzamiento de piedras y un robo a mano armada. Debido a estos incidentes, que generaron un clima de inseguridad y tensión entre los trabajadores del transporte y la comunidad en general, se convocó a un paro de transporte que afecta el servicio de este martes.
"Hubo un ataque con un balazo, otro con un piedrazo, otro de un ladrón en un colectivo y otro en el que una chofer escuchó detonaciones", informaron desde la Municipalidad de Rosario, detallando la gravedad de los acontecimientos.
Este no es un hecho aislado en la ciudad santafesina. En lo que va del mes, Rosario fue testigo de una escalada de violencia vinculada al crimen organizado, con cuatro ejecuciones ordenadas por narcotraficantes, incluidas las de dos taxistas.
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La Unión Tranviarios Automotor (UTA) local fue la encargada de comunicar la decisión de paralizar las actividades del transporte público como medida de protección para los trabajadores y en repudio a la violencia desatada.
"Como consecuencias de estas agresiones a partir de las 22.30, se procedió a realizar la retención de tareas que implica que no habrá servicios en el transporte urbano e interurbano de Rosario", comunicaron desde el gremio.
Según informó el diario La Capital, los taxistas también se unirán a la protesta, negándose a circular al menos hasta las seis de la mañana.
"Mañana veremos en el transcurso del día cómo seguimos con esta situación tan lamentable que nos toca a vivir a todos los rosarinos. Es una decisión para resguardar la integridad de nuestros trabajadores", sostuvo Horacio Yannotti, secretario general del Sindicato de Peones de Taxis de Rosario.
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