El colectivero de la Línea K atacado a balazos días atrás en Rosario falleció este domingo tras permanecer herido en grave estado desde el jueves pasado. De este modo, junto con un playero acribillado este domingo por la madrugada y dos taxistas, ya son cuatro los muertos en crímenes de sello narco en la última semana. De inmediato, UTA Rosario anunció que no habrá actividad de transporte urbano e interurbano durante el lunes.
Se trata de Marcos Daloia, de 39 años, quien estaba internado en el Hospital Emergencias Clemente Álvarez (Heca) producto del estado crítico en que fue internado poco después del hecho. La directora de ese centro asistencial, Andrea Becherucci, confirmó el deceso.
De esta manera, Daloia es el cuarto trabajador asesinado por un ataque narco durante los últimos días, tras los homicidios de los taxistas Héctor Figueroa y Diego Celentano, y de Bruno Nicolás Bussanich, el playero de la estación de servicio Puma este sábado.
El colectivero había ingresado al HECA con un paro cardiorrespiratorio y fue operado de urgencia, con un orificio de entrada en la región preauricular derecha y una lesión a partir de la primera y segunda vértebra cervical. Este sábado permanecía en estado crítico.
El trabajador había sido atacado a balazos entre las calles México y Mendoza por un sicario, quien a corta distancia le disparó en dos oportunidades. Tras el hecho, el agresor se escapó en una moto junto a un cómplice.
Los detenidos por la ola de crímenes en Rosario
El viernes por la tarde, alrededor de una veintena de personas fueron detenidas por su presunta vinculación con el asesinato de dos taxistas y del chofer.
Luego de varios allanamientos realizados en distintos puntos de la ciudad, las autoridades confirmaron que unos 20 sospechosos fueron arrestados, al igual que un menor de edad.
Todos tendrían algún vínculo con los crímenes de los taxistas Celentano y Figueroa, ambos asesinados con menos de 24 horas de diferencia. En tanto, once de los detenidos habrían tenido alguna conexión con el crimen de Daloia.
Los allanamientos y detenciones fueron ordenados por un equipo de fiscales, encabezado por María Eugenia Iribarren, a cargo de la unidad regional.
Por su parte, el Gobierno nacional convocó a un comité de crisis contra la ola de violencia que azota a la ciudad de Rosario y que causó un gran estado de conmoción.
El comité será presidido por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich; el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, e integrado por todas las fuerzas federales y de Seguridad de la provincia, al tiempo que las Fuerzas Armadas prestarán colaboración.
El Comité de Crisis que creó el gobierno nacional por los asesinatos en Rosario
El gobierno nacional creó un Comité de Crisis para intervenir en la ciudad con las Fuerzas de Seguridad federales. Minutos antes, el propio gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, había anunciado nuevas medidas para intentar controlar el territorio.
Según explicó el Gobierno nacional en un comunicado, la creación del Comité permite que la provincia reciba la asistencia de la Policía Federal, la Gendarmería Nacional, la Prefectura Naval, la Policía de Seguridad Aeroportuaria y el Servicio Penitenciario. Además el Gobierno facultó a las Fuerzas Armadas a prestar servicios en seguridad interior, con sustento en la ley 24.059 (de Seguridad Interior) artículo 27.
Por su parte, el gobierno de Santa Fe afirmó en otro comunicado propio: "En estas horas, lo primero es acompañar en el dolor a familiares y seres queridos de las víctimas de estos atentados que venimos atravesando en la ciudad de Rosario"
"Los ideólogos y ejecutores de estos hechos, que no dudamos en calificar como terroristas, pretenden recuperar los privilegios que tenían las organizaciones criminales dentro de las cárceles: quieren recuperar el delivery, tener celulares, visitas íntimas ilimitadas, y sobre todo organizar y cometer delitos desde la cárcel", siguió el gobierno de Pullaro.