El 25 de marzo también es una fecha sensible en la República Argentina si de la Memoria, Verdad y Justicia se trata. Un día como hoy, pero de 1977, la última dictadura cívico-militar secuestró a Rodolfo Walsh tras una "Carta Abierta" que había publicado 24 horas antes de su desaparición.
A 44 años de este suceso, diferentes organizaciones de derechos humanos, legisladores bonaerenses incluso familiares del periodista y escritor solicitan la expropiación de la que fue su residencia en San Vicente para transformarla en una Casa de la Memoria.
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Si bien la casa ha sido declarada patrimonio cultural de San Vicente, en ella aún viven familiares de un integrante de las fuerzas de seguridad que fue sospechoso en el operativo que terminó con el asesinato a este protagonista vital de la historia argentina.
En diálogo con Telam, el diputado Miguel Funes supo manifestar hace dos años que "el proyecto que busca expropiar la propiedad ya fue aprobado por la comisión de Tierras de la Cámara baja y desde el 7 de diciembre está en la comisión de Presupuesto, por lo que vamos a insistir en el pronto tratamiento".
Cómo fue la vida de Rodolfo Walsh en San Vicente
Rodolfo Walsh vivió en un terreno que adquirió junto a su última pareja, Lilia Ferreyra. Esto ocurrió tras el allanamiento a su casa ubicada en el Tigre. En esta nueva localidad, y alejado de la estación de trenes, el escritor se acercó al centro de San Vicente para enviar lo que sería su última "Carta Abierta de un Escritor a la Junta Militar". En la misma denunció los crímenes de lesa humanidad llevados adelante en la dictadura que persistió en el país entre los años 1976 y 1983.
Patricia Walsh, su hija, dialogó con Agencia AUNO en 2019 (último aniversario de la muerte del escritor en la que se marchó pidiendo justicia por su desaparición) y explicó: "La lucha debe seguir por este lugar, que es un símbolo y aún en 2019 continúa usurpada. Eso nos indigna, nos enoja y nos duele. Si la familia necesita una vivienda, debe acceder a una pero esa casa tiene que ser recuperada por el pueblo y ser declarada un sitio de memoria”.
A dos años de la última movilización realizada (producto de la pandemia del coronavirus, que irrumpió en el país en 2020), se continúa haciendo fuerza para que este proyecto sea escuchado y finalmente la última morada de Rodolfo Walsh se transforme en un espacio de la Memoria alejado de los fantasmas de las fuerzas represoras.