El fin de una banda mítica (y mística) como lo fue Patricio Rey y sus redonditos de ricota no era un suceso fácil de digerir para los fanáticos ni tampoco para el propio Indio Solari. El exredondo comenzó un viaje solista donde se potenció a extremos inabarcables el sentir popular por su obra artística. Sus discos, los shows, la fidelidad del público, el parkinson, Olavarría y sus memorias.
Luego del final de los redondos en 2002, el Indio se mantuvo absolutamente ajeno a la escena pública, ante la imposibilidad de tocar. Mientras Skay Beilinson, exguitarrista de la banda, emprendía su propio camino, Solari craneaba nuevas canciones pero bajo la incertidumbre en torno a cómo impactaría su regreso a los escenarios. Particularmente, dudaba si se trataba de arrancar de cero una vez más, si su poder de convocatoria iba a ser más acotado. El tiempo se encargó de despejar las incógnitas.
El tesoro de los inocentes
El camino empezó con la materialización de temas por parte del Indio, junto con el batero y productor musical Hernán Aramberri y Eduardo Herrera, ingeniero de grabación, mezcla y productor. Ambos habían tenido destacadas participaciones en discos durante la era redonda: Aramberri en Luzbelito y Herrera en Momo Sampler.
Ese compilado de canciones derivó en El tesoro de los inocentes. Allí, el Indio fue detrás de nuevos sonidos, texturas, la búsqueda de diversidad ante el agotamiento de la cultura rock. Por eso el álbum abarca nuevos géneros, como el hip hop o la electrónica, mientras Solari criticaba a las ofertas del posmodernismo, repasaba flashes del proceso de separación de Patricio Rey, el estado de inocencia o la justificación de la vida.
Con el disco terminado, Solari necesitaba una banda para tocar en directo. Herrera consiguió músicos jóvenes: primero Baltasar Comotto y después Gaspar Benegas, los pilares de la guitarra. Los "reyes magos".
En 2005 fueron convocados para integrar la banda el bajista Marcelo Torres, el multifacético Pablo Sbaraglia y pronto se sumarían los vientos de Miguel Ángel Tallarita y la voz de Déborah Dixon. Ya había dado inicio la era "fundamentalista" en el estudio Luzbola de Parque Leloir.
¿Por qué Los fundamentalistas del aire acondicionado el nombre de la nueva banda?: "El fundamentalista era yo, el culto de la temperatura ideal, nunca pretendió ser más que una pavada, era una gracia", explicó el Indio.
La primera presentación se dio en el Estadio Único de La Plata con dos funciones, y luego siguió con otro concierto en el Velódromo Municipal de Montevideo.
Porco Rex
A fines de 2007, tras haber eludido una hepatitis que puso en riesgo su salud y luego de sentir el alivio de que la peregrinación ricotera estaba dispuesta a continuar junto a él, Solari sacó a la venta su segundo disco solista, Porco Rex. El álbum tuvo de invitado especial a Andrés Calamaro bajo el apoteósico nombre de "el Inefable Señor Gama Alta" en el tema "Veneno paciente". Solari, que aparece en los créditos como "Monsieur Sandoz", expresó que el disco gira alrededor de la "muerte, el amor, el deseo y la traición".
El arte de tapa e interior del disco se debe a la burlesca manera actual de tratar al amor en la sociedad del siglo XXI. Su rostro en la tapa, un disco de estirpe más positivo en lo rítmico, más pop.
El artista presentó el disco el 12 de abril de 2008 en el anfiteatro de Jesús María, ante aproximadamente unas 40.000 personas. La segunda aparición de Solari se produjo el sábado 5 de julio del mismo año en el Hipódromo de Tandil ante 35.000 espectadores. El Indio anunció la próxima cita para el sábado 27 de septiembre en San Luis, la cual se dio en el estadio Juan Gilberto Funes, albergando 40.000 espectadores.
La gira de Porco Rex finalizó los días 20 y 21 de diciembre en el Estadio Único de La Plata junto con Calamaro, quien subió junto al Indio a cantar tres temas: "Veneno paciente", "El salmón" y "Esa estrella era mi lujo". Los conciertos fueron filmados para ser publicados en formato película en 2015.
En aquel momento se había sumado Martín Carrizo a la banda como un artista colaborador, quien luego se convertiría en el director musical de la banda.
El 19 de septiembre de 2009 se presentó en el estadio Padre Martearena de Salta capital ante más de 35.000 espectadores, reviviendo viejos temas de Patricio Rey, como "Todo un palo", "El arte del buen comer" y "Fuegos de Oktubre", entre otros.
Posteriormente, el 13 de noviembre de 2010 en el Hipódromo de Tandil, siendo su único show en el año, logró albergar la mayor cantidad de público hasta ese momento: 80.000 espectadores. La masividad rompía parámetros año tras año.
El perfume de la tempestad
El 30 de noviembre de 2010 salió a la venta su tercer material, titulado El perfume de la tempestad. Bajo la influencia de Bob Dylan, todos los personajes del disco están ajenos a una tormenta que se aproxima, según el concepto de Solari. Para esa época, Sergio Colombo se había sumado a la banda como saxofonista.
En 2011, el Indio realizó tres recitales en el marco de la presentación del disco. El 26 de marzo en el Estadio Padre Ernesto Martearena de Salta (35.000 personas), el 3 de septiembre en el Autódromo Eusebio Marcilla de Junín (100.000 personas) y el 3 de diciembre en el Hipódromo de Tandil (80.000 personas). Durante 2012 se mantuvo lejos de los escenarios.
Su regreso se produjo el 14 de septiembre de 2013 en el autódromo Jorge Ángel Pena en San Martín, en Mendoza, con 150.000 espectadores. En paralelo se cocinaba un nuevo disco.
Pajaritos, bravos muchachitos
El 12 de abril de 2014 dio un show presentando Pajaritos, bravos muchachitos ante más de 170 000 espectadores en Gualeguaychú, Entre Ríos, batiendo su récord personal. El 13 de diciembre del mismo año volvió a dar un recital en el Autódromo Miguel Ángel Pena de San Martín, en Mendoza, donde asistieron 120.000.
El nuevo trabajo fue dedicado a Iche Gomez, un amigo personal del Indio. Según contó Solari, el disco iba a llamarse Ellos, pero un día vio gorriones en su ventana, picoteándose, casi como una metáfora de los dolores humanos, un elemento desplegado a lo largo del álbum, junto con una fuerte crítica a la religión y una notable densidad dramática.
Indio, la película
A mediados del año 2015, su por entonces mánager, Julio Saez, anunció que no habría shows ese año por cuestiones de agenda de Solari. Tiempo después se estrenó una grabación del show que realizó el 21 de diciembre de 2008 en la última presentación de Porco Rex en el Estadio Único de La Plata.
La misma fue grabada por 12 cámaras HD, una Condor Cam y una cámara en un helicóptero para tomas aéreas, mientras que la mezcla de sonido se realizó en el histórico estudio de Abbey Road, La película fue presentada en el estadio Luna Park en agosto de 2015, abriendo así una gira por más de doscientas cincuenta salas de todo el país.
En una nota que dio su mánager a la revista Rolling Stone, confirmó que Solari se encontraba trabajando en memorias personales, escribiendo y preparándose para grabar otro disco, y que en 2016 habría un nuevo show.
Tandil y el parkinson
La asistencia al recital de Tandil fue de 250.000 personas, lo cual no solo batió el récord personal del músico sino que a la vez se convirtió en el recital pago con más asistentes en la historia del rock argentino. Antes del recital dejaron la banda el bajista Marcelo Torres y Aramberri. Como reemplazantes se incorporaron definitivamente Martín Carrizo en la batería, mientras que Fernando Nalé se encargó del bajo.
Minutos antes de arrancar el show, Solari sorprendió a todos al salir al escenario para hablar sobre.su estado de salud: "Se dice por ahí que tengo una enfermedad. Sí, es verdad, el Parkinson me está pisando los talones. Pero bueno. Así es la vida". El show es recordado como uno de los mejores en su etapa solista.
Olavarría, su última función
A pesar de sus complicaciones de salud, Solari se presentó en Olavarría en marzo de 2017. Las huestes ricoteras fueron una marea humana buscando la revancha por aquella prohibición que habían sufrido los redondos en 1997. La censura motivó una conferencia de prensa por parte de la banda.
Más de 300.000 personas (récord histórico para el rock nacional) disfrutaron de un show que no tuvo final feliz. En medio del concierto, Indio interrumpió su actuación de forma reiterada por tumultos y movimientos extraños cerca del escenario. Luego se dio a conocer que dos personas habían muerto.
Los medios de comunicación aprovecharon la situación para atacar su figura, mintiendo sobre los causantes de los fallecimientos y hasta en la cantidad de muertes. La agencia estatal de noticias Télam publicó que 11 personas habían muerto. La operación mediática destrozó a Solari a modo de venganza por sus posicionamientos políticos de los últimos años, durante los cuales ponderó al kirchnerismo y criticó duramente al macrismo.
Finalmente, las pericias ratificaron que no hubo muerte por aplastamiento o sofocación (como se había expresado en numerosos artículos periodísticos) y revelaron que los dos hombres tenían altos porcentajes de droga y alcohol en sus cuerpos.
"Fue algo político-mediático, la angustia en el momento era muy grande y hubo asuntos sospechosos alrededor del show. La salida fue muy difícil. Los medios querían un cromañón", señaló Solari en el libro "Recuerdos que mienten un poco", donde recopiló sus memorias.
"Internamente sabía que era mi último show, se sentía viejo, ser el Indio Solari me costaba cada vez más, me veía en videos y ya no se gustaba, no me veo a la altura del Indio", expresó. A pesar de las dificultades para seguir arriba de un escenario, su carrera continuaría de todas formas.
El ruiseñor, el amor y la muerte
El ruiseñor, el amor y la muerte es el quinto álbum de Los Fundamentalistas del Aire Acondicionado. Publicado el 27 de Julio de 2018, Solari aparece en los créditos del álbum bajo el seudónimo de "Protoplasman".
En la portada del disco aparecen los padres del exredondo, lo cual marca el hilo conductor de todo el material. A lo largo del álbum, las canciones se nutren de las personalidades de distintas ramas artísticas que marcaron la vida del Indio. Por su puesto, la muerte sobrevuela permanentemente y se explicitan los misterios alrededor de la misma.
Debido a su estado de salud, Solari no presentó el disco en público. Sin embargo, de alguna manera, los fundamentalistas del aire acondicionado iban a volver a presentarse.
Recuerdos que mienten un poco
En "Recuerdos que mienten un poco", publicado en 2019, el músico repasa su pasado y su presente al ritmo de sus recuerdos: "La memoria es lo que uno recuerda, sí, pero al mismo tiempo es lo que uno cree que recuerda, y además lo que dice que recuerda".
En el libro, el Indio habla de todos los temas: desde sus inicios en la psicodelia en su juventud hasta del futuro. "Me va a costar convencer a la gente de que no voy a tocar más. Casi nadie quiere creerlo, ¿no?", dice.
También se refiere a un tema recurrente durante su trayectoria, sus letras: "Mucha gente tendía a menospreciar a nuestro público. Pretenden que no pueden entender lo que les estoy diciendo, por eso de que mis letras son crípticas. Pero en los momentos claves de la canción, soy bruscamente claro. Puede que el relato no sea simple, la forma en que voy encadenando imágenes. Pero, cuando llego ahí, cuando digo violencia es mentir, o todo preso es político, o nuestro amo juega al esclavo… Ahí nadie se confunde ni se pierde. Eso es una bandera y así lo entienden".
La autobiografía, que el Indio Solari venía trabajando hace algunos años con el escritor Marcelo Figueras, surgió tras la publicación en 2017 de la distópica novela gráfica "Escenas del delito americano", con textos de Indio e ilustraciones de Serafín.
Indio virtual
A fines de 2019 y bajo la premisa de ayudar a Martín Carrizo, quien sufre de ELA (una enfermedad neurológica invalidante), los integrantes de los fundamentalistas decidieron hacer un show en el estadio Malvinas Argentinas para recaudar fondos que ayuden a pagar el costoso tratamiento del batero. Allí tocaron clásicos de la banda, de los redondos y canciones de El ruiseñor, el amor y la muerte.
La recepción fue tan buena que los fundamentalistas repitieron el show a principios de marzo del 2020 en el Malvinas, pero con una sorpresa especial. Durante el show, la banda montó una estructura a través de la cual proyectó un holograma del Indio. El líder del grupo cantó canciones de su último disco en un formato inédito para el rock argentino. Una manera, aunque no la deseada, de mantener vivo el fuego.
Son 72 años los que cumplirá Solari, la personalidad más convocante en la historia de la música nacional. En este presente, el Indio trabaja en nuevo disco y anticipó que piensa dar un concierto vía streaming en 2021. De momento, la posibilidad de volver a los escenarios luce "improbable", según apuntó el artista en diálogo con Radio Provincia.
Pase lo que pase, las canciones está allí, todo el tiempo. Si algo identificó a este fenómeno popular es la materialización de sueños locos y en la lírica se amplió el campo imaginario de lo posible en cada una de las vidas que se conectaron con la obra de Solari.
El "roncarol del país" sigue girando y el viaje terminará "cuando quieran ustedes", como dijo alguna vez el Indio.