Seis personas perdieron la vida dentro de un pozo de bombeo cloacal en la localidad bonaerense de Blaquier, partido de Florentino Ameghino.
El trágico suceso tuvo lugar el viernes por la tarde, cuando un bombista contratado por el municipio para llevar a cabo labores de mantenimiento en el pozo, conocido localmente como "el cigarro", descendió sin llevar puesta una máscara de protección y quedó atrapado sin poder salir.
Ante esta situación, cinco personas, incluidos tres bomberos voluntarios, intentaron rescatarlo, pero lamentablemente también quedaron atrapadas y no pudieron salir.
La principal hipótesis apunta a que las muertes fueron ocasionadas por los gases generados por el líquido cloacal acumulados en el lugar, que tiene una profundidad de unos 12 metros, lo que habría provocado la asfixia de las víctimas. También se investigaba la posibilidad de una descarga eléctrica en el sitio.
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Las víctimas, identificadas como Ricardo Bottega, de 60 años, quien ingresó primero al pozo; Carlos Renger, bombero voluntario de 39 años; Alejandro Centeno, de 36 años; Mateo Pellegrino, bombero voluntario de 27 años; Juan Ramón Sanchez, de 50 años; y Nicolás Sánchez, bombero voluntario de 28 años e hijo de Ramón, algunos fallecieron en el lugar, mientras que otros perdieron la vida en camino al hospital de Florentino Ameghino.
Durante la mañana del sábado se llevaron a cabo las autopsias para determinar las causas de los fallecimientos. Los resultados preliminares, según informó el municipio de Ameghino, indicaron que la causa de muerte fue "asfixia mecánica por broncoaspiración".
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