El de las empleadas domésticas, si bien hay un constante intento de regularizar el rubro, suele ser un trabajo que constantemente está en una situación de informal, tanto por el cobro como por las condiciones del registro para estar en blanco y así ser acreedoras de todos los beneficios y programas que tiene el Estado para con ellas. Asimismo, existen condiciones de regulación que se deben tener en cuenta y que son, en general, bastante sencillas de seguir. Las mismas se encuadran en el Convenio de Personal de Casas Particulares, y regulan lo que se abona, la categoría y si se realiza con o sin retiro, entre otras.
¿Cuántas horas se necesitan para que se pueda pasar en blanco?
Esta es una de las preguntas más recurrentes, ya que el trabajo suele ser por horas fraccionadas y por días salteados, sin llegar a ser toda la semana. En este caso, la legislación estableció en 2013 que la registración de las trabajadoras del servicio doméstico es obligatoria sin importar la carga horaria.
Asimismo, se explicó que no hay legalmente una cantidad de horas establecida para que una empleada doméstica trabaje en un hogar de familia, y se detalló que la contratación, acordada entre particular y la trabajadora o trabajador, siempre debe estar inscripta en las instituciones correspondientes.
¿Cuál debe ser el salario?
En tanto, el empleador debe abonar todos los meses los aportes y contribuciones al régimen de seguridad social y al Sistema de Riesgos del Trabajo con respecto al salario. Además, las trabajadoras registradas tienen derecho a vacaciones, licencia por maternidad, acceso a una obra social, jubilación y ART en caso de sufrir un accidente laboral.
También, se detalló que todos los trabajadores de este sector, sin importar la cantidad de horas de trabajo o la modalidad de contratación, deben estar inscriptos en el registro de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP). De esta forma, podrán acceder a los mismos beneficios sociales que tiene cualquier empleado en relación de dependencia: aportes jubilatorios, seguro por accidentes de trabajo, obra social.
Un informe técnico de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) registró que el sector ocupa aproximadamente a 1,4 millones de trabajadoras y que representa el 5,6 por ciento del empleo, el 17,4 por ciento de las mujeres ocupadas y el 22 por ciento de las mujeres asalariadas del país. Asimismo, uno de los problemas más graves es la alta tasa de informalidad laboral. Se estima que 3 de 4 empleadas domésticas no están registradas, lo que las deja fuera de los derechos laborales y la protección social.