Las máximas autoridades religiosas judías de Israel le han dicho al Vaticano que están preocupadas por los comentarios que hizo el Papa Francisco sobre sus libros sagrados y han pedido una aclaración.
En una carta, el rabino Rasson Arousi, presidente de la Comisión del Gran Rabinato de Israel para el Diálogo con la Santa Sede, dijo que los comentarios parecían sugerir que la ley judía está obsoleta.
Las autoridades del Vaticano dijeron que estaban estudiando la carta y sopesando una respuesta.
El rabino Arousi escribió un día después de que el Papa hablara sobre la Torá, los primeros cinco libros de la Biblia hebrea, durante una audiencia general el 11 de agosto.
La Torá contiene cientos de mandamientos, o mitzvot, que los judíos deben seguir en su vida diaria. La medida de cumplimineto de la amplia gama de directrices difiere entre los judíos ortodoxos y los judíos reformistas.
En la audiencia, el Papa, que estaba reflexionando sobre lo que dijo San Pablo sobre la Torá en el Nuevo Testamento, dijo: "Sin embargo, la ley (Torá) no da vida".
"No ofrece el cumplimiento de la promesa porque no es capaz de poder cumplirla ... Los que buscan la vida necesitan mirar la promesa y su cumplimiento en Cristo".
El rabino Arousi envió la carta en nombre del Gran Rabinato, la autoridad rabínica suprema del judaísmo en Israel, al cardenal Kurt Koch, cuyo departamento del Vaticano incluye una comisión para las relaciones religiosas con los judíos.
"En su homilía, el Papa presenta la fe cristiana no sólo como una sustitución de la Torá, sino que afirma que esta última ya no da vida, lo que implica que la práctica religiosa judía en la era actual se habría quedado obsoleta", dijo Arousi en la carta.
"Esto es, de hecho, parte integral de la 'enseñanza del desprecio' hacia los judíos y el judaísmo que creíamos que había sido totalmente repudiada por la Iglesia", dijo.
Con información de Reuters