Durante la tarde de este sábado, luego de las determinaciones del presidente de la Nación Alberto Fernández para intentar disminuir el nivel de contagios por COVID-19, muchas personas decidieron concentrarse en el Obelisco y la Quinta de Olivos para protestar y mostrar su descontento contra el Gobierno nacional. Cabe recordar que el mismo miércoles de los anuncios, ya habían realizado un "cacerolazo" en la residencia del mandatario.
Los manifestantes quieren dejar en claro que no están de acuerdo con las nuevas medidas adoptadas ante el rebrote y la segunda ola de la pandemia por coronavirus, en especial mostrándose en contra del cierre de las escuelas y la suspensión de las clases presenciales. Es importante destacar que, siendo por 15 días, los maestros y las maestras continuarán dando clases pero a través de la modalidad virtual.
Dicha manifestación, como suele ocurrir en cada oportunidad, fue convocada por un sector de la oposición e independientes. Algunos de ellos son agrupaciones de padres y madres de chicos en edad escolar, y otros, gastronómicos. Se realizó a través de las redes sociales bajo las consignas #17A y "Todos a las calles". Llevaron banderas argentinas y carteles mostrando sus discrepancias con el Gobierno, tanto los que estaban a pie como los que se encontraban en sus vehículos.
Mientras algunos ciudadanos y algunas ciudadanas siguen quejándose y mostrando su enojo por las restricciones, los casos siguen subiendo en todo el país. Este sábado, el Ministro de Salud registró casi 20 mil casos -número alto para ser de fin de semana- y 80 nuevas muertes durante las últimas 24 horas. Como si esto fuera poco, en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), donde rigen las medidas restrictivas del DNU, el porcentaje de ocupación de camas de terapia intensiva es de 74,3% y sigue subiendo.