Este sábado 3 de junio se cumplen ocho años de la primera marcha de Ni Una Menos, el movimiento feminista que nació en 2015 como una expresión de repudio ante el femicidio de Chiara Páez en la provincia de Santa Fe. Organizaciones feministas y familiares de víctimas de femicidios se reunirán para recordar este hito y continuar la lucha contra la violencia machista.
El femicidio de Chiara, una joven argentina de 14 años, fue el detonante para que las mujeres alzaran la voz. El nivel de indignación y angustia llevó a distintas organizaciones feministas y víctimas de violencia machista a exigir medidas que detuvieran las expresiones de odio a nivel nacional.
La consigna "Ni Una Menos" fue adoptada desde el principio y logró convocar y sintetizar la impotencia que se extendió por todo el continente. Los encuentros que surgieron en Argentina se expandieron gradualmente a decenas de países, uniéndose al descontento contra la misoginia en todas sus formas. Primero se difundió en América Latina y luego llegó a Europa.
Qué pasó con el caso de Chiara Páez
En detalle, Manuel Mansilla fue juzgado y condenado a 21 años de prisión por el asesinato de Chiara Páez. Ambos mantenían una relación de pareja que comenzó en octubre de 2014 y terminó en febrero de 2015, dos meses antes de que él la asesinara. El 9 de mayo de 2015, apenas unos días después de cumplir 14 años, Chiara se encontró con sus amigas y a medianoche fue a la casa de Manuel, como habían acordado, y estuvieron en el galpón ubicado en el patio de la vivienda.
Según reconstruyó el juez Adrián Godoy, Chiara fue atacada y se le hizo un corte de seis centímetros en el lado izquierdo del cuello con un cuchillo. Luego, Manuel la sujetó del cuello con una mano y de la cabeza con la otra, golpeándola contra el suelo y la mesa de trabajo del galpón hasta que dejó de moverse.
En febrero de 2022, la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe anuló la pena de 21 años y 6 meses de prisión al femicida y ordenó que sea nuevamente juzgado por un tribunal de la Justicia de Menores. El fallo establece que corresponde una sanción por "tentativa de homicidio" debido a que Mansilla era menor de edad en el momento del brutal asesinato de Chiara.
Las jóvenes que siguen con el legado de Ni Una Menos
Cuando la juventud siente la necesidad de estar en las calles, no solo no se ausenta, sino que toma protagonismo. Las ganas de luchar por una realidad mejor surgen automáticamente en los jóvenes que coinciden en que el cambio es posible, urgente y necesario. La Generación Z, conformada por aquellos nacidos entre 1995 y 2010 aproximadamente, considera que la igualdad de género, el respeto por la diversidad, la equidad social y la protección del medio ambiente son los temas que más les preocupan.
En Argentina, se registra un femicidio cada 38 horas, según datos recopilados por el Observatorio Nacional Mumalá hasta el 30 de mayo de 2021. Además, se han contabilizado 143 muertes violentas de mujeres, travestis y trans, así como 140 intentos de femicidios en lo que va del año.
El 3 de junio se convirtió en una fecha de suma importancia para plantarse y exigir un cambio. Hace ocho años, miles de mujeres y disidencias se unieron en un mismo reclamo impulsados por la indignación y el hartazgo. Además, surgió un espacio de contención. El primer Ni Una Menos en 2015 marcó un antes y un después para los jóvenes.
El femicidio de Candela Sol Rodríguez, una niña de 11 años encontrada asesinada en una bolsa en la localidad bonaerense de Villa Tesei, partido de Hurlingham, fue otro momento en el que las jóvenes identificaron que la violencia de género y los femicidios en Argentina eran un tema preocupante.
El grito de Ni Una Menos no se silencia y la idea de deconstruir las construcciones sociales impuestas durante tantos años cobra relevancia. Los hombres también se ven interpelados por esta fecha, por los reclamos del feminismo que los invita a reflexionar sobre sus acciones y por la existencia misma del patriarcado.
La Generación Z tiene una visión amplia de lo político y reivindica la política de la diversidad, escapando de los binarismos y cualquier tipo de imposición. En las elecciones de 2019, los jóvenes de 16 años representaron el 2,8% del padrón y, en general, la Generación Z representó el 22% de los votantes, según datos de la Cámara Nacional Electoral y el INDEC. Todo puede ser repensado y modificado. La mayoría de los jóvenes coinciden en que "todo es político".