Valentino Busso, el niño santafesino de cuatro años que había sido diagnosticado con un neuroblastoma, murió este lunes en Barcelona. Valentino había viajado junto a sus padres a la ciudad española para poder tratarse un tumor en el riñón.
La noticia fue confirmada por sus padres a través de las redes sociales. De hecho, su madre, Guillermina González Canelo, compartió en su cuenta de Instagram un sentido video en el que se la ve junto con el papá y el hermano mayor e Valentino soltando globos en dirección al cielo.
“Te despedimos de este plano, amor, te soltamos para que puedas correr fuerte y sin dolor. Mandanos señales cuando puedas y contanos cómo es todo por allá... Te extrañamos y te amamos para siempre, Torito”, escribió.
Luego de que Valentino fuera diagnosticado en febrero de 2020 con un tumor en la glándula suprarrenal, la familia oriunda de Venado Tuerto logró conseguir 32 millones de pesos para que el niño pudiera recibir un tratamiento de inmunoterapia monoclonal para reducir el neuroblastoma grado cuatro ubicado en el área del riñón izquierdo.
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Aún en Argentina, el cuerpo de Valentino respondió bien a las sesiones de quimioterapia y la metástasis desapareció, sólo quedaban rastros en su médula ósea. El 21 de julio fue operado para la extirpación del tumor, pero en esa intervención el niño perdió el riñón.
Luego de eso, Valentino pasó tres días en terapia intensiva, y una vez que recibió el alta, debió continuar con la quimioterapia. En septiembre, sus padres crearon un perfil de Instagram para recaudar el dinero necesario para viajar a España.
Luego de un nuevo diagnóstico adverso y de afrontar el tratamiento en Barcelona, los padres del niño confirmaron su muerte desde España.