Las intoxicaciones por monóxido de carbono ya son casi el doble que el año pasado

En lo que va del año, 465 personas se intoxicaron por este gas, un promedio de casi 3 por día. Ya casi duplican los 283 casos registradas durante los primeros 6 meses del año pasado.

15 de junio, 2024 | 18.20

En lo que va del 2024 ya se registraron 465 intoxicaciones por monóxido de carbono, casi el doble de lo que se había notificado en el 2023 a esta misma altura del año. Los personas afectadas por este gas, que en casos graves puede provocar la muerte, ya son un 63% más que las del año pasado, según un informe del Ministerio de Salud.

"Durante 2024 hasta la semana 22 se notificaron 465 casos confirmados. El 80% de estos se confirmó por criterio clínico, el 12,9% por laboratorio y el resto por criterio epidemiológico", se indica en el Boletín Epidemiológico Nacional de la semana 22, publicado por el Ministerio de Salud. Si bien los casos vienen en aumento desde 2021, el número actual de contaminados por el denominado "asesino invisible" -porque no tiene olor, color ni saber y no irrita ojos ni nariz- casi duplica los 283 registrados hasta este mismo mes de 2023.

El Ministerio detalló que "desde el 2019 a la actualidad se registraron 34 fallecidos distribuidos en todos los años, siendo el 2023 con 11 el año con más casos fallecidos registrados", por lo que estimando el aumento exponencial de intoxicados de este año, el número de decesos anuales podría ser mayor. Además, el índice de intoxicaciones supera lo esperado en muchas regiones del país, como en las provincias de Buenos Aires, Mendoza y Chubut.

El boletín del Gobierno explica que “el monóxido de carbono es un gas inodoro, incoloro, insípido, no irritante, que se produce a partir de la combustión incompleta de gas natural u otros productos que contengan carbono”. También detalla que “estas características hacen que no sea percibido por los sentidos y que la persona expuesta no presente ninguna reacción de defensa, facilitando el proceso de intoxicación por inhalación”. Con respecto a morbilidad, indica que se “presenta un problema significativo, con secuelas cognitivas luego de una intoxicación aguda grave”.

Según explicaron desde Salud, los síntomas más frecuentes de este tipo de intoxicación son debilidad, cansancio, cefalea, irritabilidad, somnolencia, mareos, confusión, impotencia funcional de los miembros inferiores, nauseas, vómitos, dificultad respiratoria y visión borrosa, entre otros. El boletín detalla que la mayoría de las intoxicaciones fueron provocadas por estufas a gas y advirtió que para revenirlas "debemos pensar que todos podemos estar expuestos en el hogar, en el trabajo, en la escuela, en un sitio de recreación, en cualquier lugar cerrado que tenga una fuente de combustible quemándose”.

Prevenciones para evitar intoxicaciones por monóxido de carbono, según el Ministerio de Salud

  • Si se encienden brasas o llamas de cualquier tipo, no dormir con éstas encendidas y apagarlas fuera de la casa.
     
  • No usar el horno y hornallas de la cocina para calefaccionar el ambiente.
     
  • No mantener recipientes con agua sobre la estufa, cocina u otra fuente de calor.
     
  • El calefón no debe estar en el baño, ni en espacios cerrados o mal ventilados.
     
  • No encender motores a combustión (grupos electrógenos, motosierras, etc.) en ambientes cerrados, en sótanos o garajes.
     
  • No mantener el motor del auto en funcionamiento cuando el garaje está cerrado.
     
  • Si su garaje está conectado al resto de su hogar, cierre las puertas.
     
  • Ventilar toda la casa una vez al día, aunque haga frío.
     
  • Dejar siempre una puerta o ventana entreabierta, tanto de día como de noche, y aun cuando haga frío.
     
  • Instalar detectores de monóxido de carbono en el ambiente.

¿Qué hacer en caso de intoxicación?

Ante la sospecha de intoxicación por monóxido de carbono, el Hospital de Clínicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA) da las siguientes recomendaciones:

  • Es vital que todos los habitantes del domicilio acudan de inmediato a un centro de salud cercano (muchas veces solo acuden los que tienen más síntomas y otros se quedan, inadvertidamente, con la fuente y con el riesgo de una intoxicación grave).
     
  • El tratamiento temprano puede prevenir complicaciones graves a largo plazo.
     
  • El oxígeno es fundamental en el tratamiento inicial, y en casos graves, se puede requerir terapia intensiva o el uso de una cámara hiperbárica.
     
  • Es importante informar a otras personas que hayan compartido el espacio y a vecinos del mismo piso y los superiores, ya que el monóxido de carbono puede propagarse fácilmente entre los pisos del edificio porque tiende a elevarse al ser menos denso que el aire (o sea, más liviano).
     
  • El seguimiento médico es crucial incluso después del alta hospitalaria, para asegurar una recuperación completa y evitar recaídas.