En el marco de una escalada de tensión entre el Gobierno de Misiones y trabajadores/as de diferentes sectores, se confirmó que efectivos de Infantería se sumaron a las movilizaciones y protestas sociales por los "insuficientes" -según expresaron- aumentos salariales ofrecidos por la provincia. Asimismo, según pudo conocer El Destape, a las protestas de policías, docentes y personal de salud también se agregaron empleados judiciales, municipales de Posadas y trabajadores de EMSA (Electricidad de Misiones Sociedad Anónima).
Medios locales señalaron este miércoles que las y los trabajadores planean continuar con el acampe hasta que el Gobierno -ya sea el de la Provincia o el Nacional- les brinde una respuesta cercana a lo que pretenden de cara al reclamo salarial; si esto no sucede, no tienen intenciones de cambiar la situación que se generó en las calles. "En cuanto a la violencia, muy tranquilo. La ciudad de Posadas está cortada en varios puntos pero se vive con tranquilidad", explicaron desde Canal 4 Misiones.
A su vez cabe remarcar que a pesar de la medida impuesta por el ministerio de Seguridad de la Nación, a cargo de Patricia Bullrich, la Policía Federal Argentina (PFA) y Gendarmería estuvieron solo un día y no generaron grandes problemas. "Ahora, por lo menos, no están en el lugar de las manifestaciones", aclararon. Tras diversos cortes en las últimas horas, los accesos a Misiones están habilitados y las rutas cortadas por docentes aunque se abren cada dos o tres horas para que los vehículos continúen su camino.
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Más allá de esto, cabe señalar que el presidente Javier Milei se desligó del problema y aseguró que la cuestión no debe resolverlo en Ejecutivo nacional. Según pudo confirmar El Destape en las últimas horas, Nación afirma que "es un asunto provincial, lo tiene que solucionar la provincia". Asimismo señalaron que quien se hará cargo del tema es la ministra Bullrich, con Gendarmería. "Están acá con muy poco personal; la respuesta del Gobierno nacional es mandar a Gendarmería, pero lo que necesitamos es salarios", apuntaron los docentes. Por otro lado, las autoridades confirmaron que no tienen pensado intervenir la provincia por más que el conflicto escale.
Desde UTE Misiones manifestaron -en las últimas horas- que los chicos "no tienen clases hace varias semanas" y que a lo largo de estas semanas "se han hecho asambleas con los padres para explicarles lo que pasa y apoyan esta medida porque es inviable, no se puede vivir así". Más allá de lo expresado desde el entorno del Presidente, el gremio docente apuntó: "Hay culpa compartida porque este reclamo recrudece luego de que sacan el Fondo de Incentivo Docente. El Gobierno nacional tiene responsabilidad y el provincial también, la culpa es compartida. No podemos vivir con estos salarios; la respuesta es mandar a Gendarmería, nuestros hijos no pueden comer con palos".
Mientras tanto, los sucesos se agravan día a día. Sindicatos docentes nacionales confirmaron el paro del próximo jueves, que además incluirá una movilización al Congreso mientras que gremios estatales iniciaron planes de lucha en diferentes lugares del interior. Poco a poco, las protestas se van repitiendo en otras provincias y parecen ganar cada vez más volumen. Corrientes, Santa Fe, Mendoza y Neuquén son algunas de las provincias que empiezan a enfrentar reclamos sectoriales, resultado del feroz recorte de recursos del Ejecutivo a las administraciones del interior.