La abogada brasilera Carla Junqueira, quien logró la condena contra el actor Juan Darthés al representar a Thelma Fardin, realizó junto a su pareja una fuerte denuncia luego de que un hombre –de entre 35 y 40 años– agredió a cachetazos y empujones a su hijo de cinco años, que padece Trastorno del Espectro Autista (TDA), en una plazoleta del barrio porteño de Belgrano. En la denuncia interviene la Fiscalía de Primera Instancia en lo Penal, Contravencional y de Faltas N° 5, a cargo de Miguel Ángel Ramón Kessler y la causa está caratulada como "lesiones leves" contra el menor en cuestión.
Según se refleja en la denuncia ante la Comisaría Vecinal 13 C, el 8 de octubre pasadas las 19 hs, el niño llamado Benjamín regresó a su domicilio con su cuidadora presentando "lesiones y dolor en su rostro y pecho", luego de que la mujer –llamada Nilda Mercedes– lo llevara al Instituto Soma donde se realiza un tratamiento de terapias semanales durante diversas jornadas. Según indicó la propia Nilda, se dirigieron a la Plazoleta Rafael del Diego ubicada en Arcos al 1200 para que el pequeño utilice los juegos didácticos. "En un momento dado, Benjamín caminando por el lugar rozó sin intención a otra menor de un año de edad aproximadamente, que se encontraba jugando y luego de ello, pateó un juguete ubicado próximo a dicha menor, sin impactarla –aclarando que la menor de un año a raíz del roce no sufrió ningún golpe o daño a su integridad física–", relatan.
"Se hizo presente una persona de sexo masculino (...), quien comenzó a insultar al menor y le propinó un empujón y posterior a ello, un cachetazo en el rostro. Al notar dicha situación, Nilda se aproximó al lugar y procedió a calmar a Benjamín debido a la crisis que le había generado la agresión de ese adulto, alejar al agresor y proteger con su cuerpo a Benjamín a fin de que cese con su actitud; quien a los pocos segundos, regresó continuando con los insultos y le propinó nuevamente un cachetazo en el rostro al menor", detallan en la denuncia. Seguido de ello, la mujer se retiró con el niño.
Luego de comunicarse al 911 y de pedir la asistencia del SAME para que observen al niño, Benjamín fue examinado por el personal médico. "Presentaba lesiones en pecho, rostro y ambas orejas por dilatación por golpe", sostienen. Frente a ello, tanto la abogada como su pareja –y padre del niño– llamado Pablo deciden instar a la acción penal contra el agresor. Como primeras medidas, el fiscal Kessler solicita que asistan junto a Benjamín a la División Medicina Legal para que este sea examinado por personal médico y así puedan realizar el informe médico legal.
Al día siguiente, el 9 de octubre pasado, se realizó el informe pericial a cargo del Dr. Sebastián Alejandro Busso –perito forense (MP:459746)– quien tras el examen médico legal señaló: una "lesión del tipo contusa simple, caracterizada por ser hematoma de coloración negro-azulado de 2x2 centímetros aproximadamente que eleva el plano cutáneo por efecto de masa" en la mejilla izquierda mientras que a su vez, "presenta un edema y eritema generalizado" en su oreja izquierda.
Sobre el hematoma en la mejilla, el médico señala que se reconoce como "mecanismo idóneo de producción el choque o golpe con o contra cuerpo duro y romo, con idoneidad para originar un derrame hemático coleccionado de la región contundida" y asegura que esa lesión, como también el edema y el eritema en la oreja, "podría corresponder a una lesión generada por el golpe con elemento contundente propio de una mano abierta". A su vez, las califica como leves ya que con el tratamiento adecuado y de no mediar complicaciones podrán ser sanadas rápidamente.
"Más allá de lo aberrante del hecho de golpear a un niño de tan corta edad, la situación se agrava debido a que nuestro hijo padece de Trastorno del Espectro Autista (TEA), lo cual se acredita con el certificado de discapacidad correspondiente. En estos casos, el daño psíquico asociado a las agresiones como las que sufrió nuestro hijo, es extremadamente severo. Para estos niños, las agresiones físicas no solo dejan marcas en el cuerpo sino que también producen daños en su psiquis que desencadenan retrocesos graves en su desarrollo emocional y psicológico, retrocesos que pueden tomar años de terapia y medicación para mejorar", manifestó la querella.
En esa línea, los padres de Benjamín señalan que desde la agresión "ha mostrado un retroceso significativo en su evolución terapéutica" (desarrollando crisis de miedo recurrentes, ansiedad, crisis y episodios de violencia –incluyendo autolesiones– , falta de apetito y de sueño, pesadillas y regresiones en su conducta, como el control de esfínteres que lo llevó a volver a orinarse encima); por lo que su estabilidad emocional "se ha visto gravemente afectada".
"La conducta del adulto que agredió a nuestro hijo menor, a la vez de discapacitado, podría subsumirse en la de lesiones graves (artículo 90 del Código Penal de la Nación), en la medida que el bien jurídico protegido por la figura es la salud individual en un sentido amplio, que comprende también la salud mental, agravado en el caso que nos ocupa por tratarse de un menor de 5 años con discapacidad", sentencian; remarcando que en casos similares, la jurisprudencia argentina ha reconocido que las lesiones psíquicas y los traumas causados por actos de violencia contra niños -especialmente con este tipo de trastornos- y son considerados con "la mayor severidad, debido a su gravedad".
Sobre el cierre, la querella solicitó imágenes de las calles aledañas al momento del hecho, que se requieran las cámaras privadas de inmuebles cercanos y se cite a una testigo presencial de la agresión.