La Central General de los Trabajadores (CGT), junto a varias organizaciones gremiales, se prepara para una gran marcha este 27 de diciembre en lo que se ha denominado el primer punto de conflicto entre la central obrera y el presidente Javier Milei. El objetivo es protestar contra el reciente Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) presentado por el Poder Ejecutivo, que propone cambios significativos en el escenario económico y laboral argentino. Líderes sindicales y trabajadores se manifestarán en esta movilización para expresar su descontento y exigir la derogación del decreto.
¿Cuándo es la marcha de la CGT contra el DNU de Milei?
La Central General de los Trabajadores (CGT) se prepara para una importante movilización este 27 de diciembre. La marcha es una respuesta directa al reciente Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) impulsado por el presidente Javier Milei, que propone cambios significativos en el panorama económico, político y social del país. Los principales líderes sindicales de la CGT, tras una reunión clave, han decidido organizar esta manifestación en lugar de un paro laboral. La protesta busca cuestionar un conjunto de reformas que alcanzan a más de 300 artículos legislativos, afectando no solo el ámbito laboral, sino también aspectos fundamentales de la vida cotidiana de los trabajadores.
Héctor Daer, secretario general de la CGT, ha sido la voz principal en esta convocatoria. Él y otros dirigentes han anunciado que presentarán ante la Justicia un pedido de inconstitucionalidad del DNU. Este documento no solo impacta en leyes laborales, sino también en normativas como la Ley de Alquileres y el código aduanero, temas esenciales para la economía nacional y la producción. Daer enfatiza la importancia de suspender todos los efectos del DNU, señalando la necesidad de un retroceso en la implementación del decreto.
La movilización está programada para el miércoles a las 12, teniendo como destino el Palacio de Tribunales. Este lugar simboliza el eje central de la protesta, en donde se presentarán las acciones legales contra el DNU. Pablo Moyano, figura clave en la organización, ha afirmado que la CGT busca anular este decreto que considera perjudicial para millones de argentinos. Además, ha anunciado que se discutirá un plan de lucha más amplio, que podría incluir un paro nacional.
La CGT, junto con las dos CTA, se ha mostrado firme en su rechazo tanto al DNU como al protocolo antipiquetes propuesto por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. Esta postura resalta la convicción de que el ajuste económico no debe recaer sobre los trabajadores. Las manifestaciones sindicales también han encontrado eco en el Congreso, donde representantes de diversos sindicatos se reunieron con legisladores para solicitar un freno al DNU.
Se suman adhesiones a la marcha de la CGT
El alcance de la convocatoria a la marcha de la CGT se amplió en las últimas horas con la adhesión de distintos gremios y asociaciones. Sectores como el Sindicato Único del Personal Aduanero (Supara) y la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre) han declarado su estado de alerta y movilización. Estas organizaciones ven en el DNU una amenaza directa a los derechos laborales y consideran que su aplicación significaría un retroceso significativo en las conquistas obtenidas tras años de lucha. Supara, en particular, ha expresado su preocupación por los cambios propuestos en el Código Aduanero y otros temas tributarios, y planea elaborar un documento técnico detallando el impacto potencial de estas medidas. El gremio se ha sumado a la movilización, convocando a sus delegados y dirigentes a unirse a la CGT en Tribunales para reafirmar su oposición al DNU y defender los derechos de los trabajadores.
Por su parte, la Uatre también ha mostrado su desacuerdo con el decreto, subrayando su preocupación por el impacto negativo en la clase trabajadora. José Voytenco, líder del gremio, ha enfatizado que los trabajadores rurales no tolerarán un ataque a sus derechos laborales y sociales. La Uatre considera que el decreto fomenta la precarización laboral y reduce los derechos de los trabajadores, bajo la falsa premisa de ofrecer más libertad.