En un nuevo episodio que deja en evidencia el peligro de tener un arma de fuego en casa, un hombre mató de manera accidental a su hijo tras pensar que ladrones habían entrado a su hogar ubicado en el barrio Guiñazú, en la zona norte de Córdoba Capital. Como consecuencia, el autor del crimen quedó detenido mientras se define su situación procesal.
El trágico hecho sucedió este sábado cerca de la medianoche, cuando Víctor Hugo Pérez Padilla (49) escuchó ruidos en el patio de su vivienda ubicada en calle Del Moxeno 44. Al asomarse, según fuentes policiales, observó sombras y movimientos de personas, por lo que decidió tomar una escopeta calibre 16 de doble caño y, según las primeras informaciones, efectuó un disparo contra una silueta. Según diría luego, se produjo un desbande de esas sombras, de manera que ejecutó un segundo tiro. Luego, empezaron a escucharse gritos y pedidos de auxilio.
La desesperación se apoderó de su persona cuando comprobó que el joven herido era Rodrigo Pérez Marcani, su hijo de 20 años. Inmediatamente, el hombre llamó a su esposa y, juntos, lo cargaron en el Fiat Duna Weekend de la familia y lo trasladaron al Hospital Elpidio Torres, pero el cuerpo médico no pudo hacer nada para salvar la vida del chico: Rodrigo falleció producto de un impacto en un omóplato.
Pérez Padilla se marchó del hospital, fue hasta la casa, buscó la escopeta y, en una crisis nerviosa, se entregó a la Policía. El hombre, que es un trabajador de la zona, quedó detenido y, por orden de la Fiscalía, se comisionó a personal policial a realizar distintas averiguaciones para colaborar con la Policía Judicial.
Córdoba: entraron con el auto a los tiros en un barrio e hirieron a una mujer
El barrio 2 de abril fue testigo de otro suceso violento este sábado por la tarde. Después de una balacera perpetrada desde un automóvil contra una vivienda del sector, los policías incautaron al menos 18 vainas servidas de calibre 9 milímetros y un cuchillo.
Todo ocurrió minutos antes de las 14, cuando un Peugeot 207 irrumpió con tres ocupantes y comenzaron a los tiros contra uno de los domicilios. Por testimonios recabados en el lugar, los investigadores sospechan que la agresión estaba destinada para el hermano de una mujer de 32 años, quien resultó herida.
Los delincuentes escaparon disparando por las calles del barrio. Al mismo tiempo, los vecinos del lugar buscaban auxilio para la herida que fue trasladada hasta el Hospital Príncipe de Asturias: presenta heridas de arma de fuego en el abdomen y en un antebrazo, pero se encuentra estable. “No le comprometió ningún órgano”, señalaron las fuentes consultadas por el medio local El Doce.
A través de las cámaras de la central de monitoreo, personal policial pudo seguir el recorrido del automóvil y lo vieron ingresar a una vivienda de barrio Ampliación Cabildo. Hasta allí llegaron varios patrulleros que encontraron el vehículo en el garaje y detuvieron a una sospechosa de 35 años. La mujer admitió que había estado en el lugar del ataque, pero habría declarado que no tuvo participación directa en el hecho.