Desde hace varias semanas, las personas más millonarias de Argentina intentaron boicotear el impuesto a las grandes fortunas. No solo a través de campañas mediáticas sino también con intentos judiciales. Entre ellos aparecieron dos nombres del mundo del fútbol. Uno de ellos es Carlos Tevez y el representante Alberto Marcelo Simonian.
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En el caso del futbolista de Boca, Carlos Tevez esperó hasta el último momento para presentarse en la Justicia para no pagar el impuesto a las grandes fortunas tal cual le correspondería. Lo hizo un día antes del vencimiento de la obligación de presentar la declaración jurada. El actual atacante xeneize, oirundo de Fuerte Apache utilizó un argumento similar al de otros empresarios y aseguró que el impuesto “es confiscatorio”. La causa recayó en el Juzgado Contencioso Administrativo Federal N°4, a cargo de la doctora Rita Ailán.
No es la primera noticia que salpica a Carlos Tevez de manera extrafutbolística y que tiene que ver con sus negocios. El delantero quedó salpicado en el escándalo de los parques eólicos de la familia Macri. Según una investigación del diario Perfil, el futbolista tuvo el 10% de las acciones de Sideli SA. Esa investigación está a cargo del juez Marcelo Martínez De Giorgi. Por otro lado, vale recordar que Carlos Tevez tuvo su primer pase al fútbol brasileño en 2005, a través de Gustavo Arribas -ex jefe de la AFI-, que despertó una investigación por presunto lavado de dinero. Doce años después, cuando el “Apache” abandonó Boca para jugar en China, a través del mismo intermediario, también existió una denuncia por evasión que llegó al fuero Penal Económico y que se mantiene dormida.
El caso de Marcelo Simonian
También se conoció que uno de los que presentó el amparo para no pagar el impuesto solidario a las grandes fortunas fue el representante de jugadores, Marcelo Simonian. Es agente es uno de los más importantes del mercado argentino y, entre tantos futbolistas, maneja el futuro futbolístico de Gonzalo “Pity” Martínez y Javier Pastore. Incluso, para los más futboleros, fue el representante que llegó a ubicar al ignoto Leandro Grimi en el Milan de Italia.
En el caso de Javier Pastore, Simonian se vio involucrado en una polémica con el multimillonrio dueño del PSG, Nasser Al-Khelaifi. Los diarios The Guardian -del Reino Unido- y Mediapart -de Francia- aseguraron, a través de una operación conocida como Football Leaks, que el qatarí le pagó una comisión de dos millones de dólares por el pase de Pastore desde el club italiano Palermo. Esta situación viola los reglamentos de transferencias. La acusación por parte de los medios no llegó a buen puerto y el propio Paris Saint Germain fue a la justicia por “falsificación y el uso de documentos falsos”.
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