Pilar, la nadadora más joven en cruzar el Río de la Plata: “Sigo sin poder creerlo”

Con tan solo 19 años, se transformó en la más joven de Argentina en alcanzar ese objetivo. Ahora busca ser campeona mundial de aguas abiertas. Su historia y los sueños que quedan por cumplir. 

15 de junio, 2023 | 00.05

El 13 de marzo pasado, Pilar Tellería nadó durante 12 horas desde Colonia del Sacramento, Uruguay, hasta Punta Lara, y se consagró como la nadadora argentina más joven en cruzar el Río de La Plata. Lo soñaba desde los 14 años y lo había intentado en 2022, pero recién un año después logró cumplir su objetivo acompañada de su equipo de entrenamiento y su familia.

La joven de 19 años, oriunda de Ituzaingó, había intentado cruzar el Río de La Plata en marzo del 2022, pero por cuestiones de organización y preparación, no logró hacerlo. En esta oportunidad, acompañada de su entrenador y todo un equipo de profesionales que la asistieron psicológica y emocionalmente, Telleria cumplió con uno de sus sueños y ahora busca ser campeona mundial de aguas abiertas. “Todavía sigo sin poder creer lo que pasó. Cada vez que pienso en lo que hice pienso en qué loco, a dónde me llevó esto que amo, que es nadar”, expresó.


Todo empezó a los 11 años, cuando Pilar comenzó a nadar en pileta. A los 14 tuvo su primera carrera de 800 metros, en aguas abiertas, y desde ese momento supo que quería dedicarse al deporte. A los 15 convenció a su entrenador para que la preparara, porque quería competir en una carrera de 20 kilómetros que duró 4 horas.

“A los 15 años terminé de entender que quería ser una nadadora de aguas abiertas, después de la carrera de 20 kilómetros. Luego de esa experiencia, me propuse cruzar el Río y pasé horas mirando videos de otros nadadores, de cómo se preparaban y cómo era el después de cada carrera. Decía: 'Yo quiero eso'”, manifestó la joven.

El día llegó en el 2023. Luego de aquel primer intento fallido por cruzar el río un año antes, la nadadora emprendió un entrenamiento arduo que requirió de muchas horas, como también de un buen acompañamiento psicológico.

“La preparación me llevó jornadas de 6 horas, nadando en pileta, más entrenamiento en el río, donde nadaba entre 8 y 10 horas. Un mes antes de hacer el cruce, fui con mi equipo a nadar 10 horas a Entre Ríos, donde hicimos todo, tal cual, lo que iba a ser el cruce del Río de La Plata. Fue una preparación muy específica y con mucho acompañamiento psicológico”, explicó.

Cumplir un sueño 

El 13 de marzo, Pilar comenzó su nado a las 6 de la mañana en Colonia del Sacramento. Además de su equipo, también viajó en la lancha que la acompañaba Jorge “Coco” Conte, un exnadador de 82 años que supo marcar cuál era el camino más indicado, según el horario y las complicaciones que presentaba el Río ese día.

“Cuando se planean cruces de este estilo hay toda una organización que tiene que ver con la autorización por parte de la prefectura, para poder hacerlo. Por otro lado, hay gente que sabe y estudia qué fechas son las adecuadas para cruzarlo y, en eso, fue muy importante Coco, porque el Río es cambiante. Él ya había cruzado nadando y fue quien me guió ese día”.

Entre lágrimas y cansancio, la joven llegó a la playa de Punta Lara donde la esperaba su familia, luego de 42 kilómetros a nado. Entre los recuerdos que nadie le va a poder borrar, destaca el amanecer desde el Río y los últimos 200 metros que le indicaron que estaba a punto de cumplir su sueño.

“Nunca me voy a olvidar del amanecer en el Río y tampoco la llegada. En los últimos metros, que ya veía a mi familia, se me puso la corriente en contra y terminé el cruce llorando, de la emoción y el cansancio”, cuenta Pilar.

Con el objetivo de ser la nadadora más joven en haber cruzado el Río de La Plata, ahora Tellería busca un lugar en el ranking del “Circuito Mundial” y sueña con ser campeona mundial de aguas abiertas. “La carrera más cercana es la Maratón Acuática Santa Fé-Coronda y vamos a intentar ingresar ahí, para medirme con otros nadadores y entrar en el ranking”.

Entre sus referentes, Tellería destacó la aparición de Delfina Pignatiello, la joven nadadora que obtuvo dos medallas en los Juegos Olímpicos de la Juventud de 2018.

“La decisión de nadar en aguas abiertas también tuvo que ver con Delfina, en el momento que se hizo conocida, porque yo veía que en las notas contaba todo el tiempo que le dedicaba al entrenamiento y era lo que yo quería. Yo entendí que quería vivir del entrenamiento y del deporte”.

Por último, la nadadora resaltó el acompañamiento de sus padres que, en un principio, creyeron que la idea de cruzar el Río sería pasajera, pero cuando vieron la dedicación y el tiempo que ella le asignaba a su entrenamiento, entendieron que se trataba de una pasión.