La mediática Charlotte Caniggia declara esta mañana como testigo en la causa que investiga el crimen del empresario Fernando Pérez Algaba, que apareció en julio descuartizado en en una valija en un arroyo de Ingeniero Budge, Lomas de Zamora. La modelo deberá prestar declaraciones luego de ser señalada por uno de los siete detenidos de la causa.
En este marco, la hija del exfutbolista Claudio Paul Caniggia fue citada para las 10 en la sede de la SubDelegación Departamental de Investigaciones (SubDDI) de Esteban Echeverría, ubicada en el cruce de las avenidas General Las Heras y Pedro Suárez, de la localidad de Monte Grande, al sur del conurbano bonaerense.
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Según explicaron las fuentes a Télam, la mediática fue citada por el fiscal Marcelo Domínguez, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 5 de Lomas de Zamora, para declarar como testigo luego de ser mencionada en la declaración indagatoria del comisario de la Policía de la Ciudad Horacio Mariano Córdoba (48), uno de los de siete detenidos por el homicidio de Pérez Algaba (41).
Entre otros dichos, Córdoba sostuvo en su indagatoria que Pérez Algaba lo citó en una oficina de Puerto Madero, "muy ostentosa, donde había muchas computadoras, con chicos haciendo 'trading'", que según dichos de la propia víctima, "se la había prestado Charlotte Caniggia".
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A raíz de este testimonio, el abogado Javier Ignacio Baños, quien representa a Rodolfo Pérez Algaba, hermano de la víctima, pidió que Charlotte declare en la Fiscalía para dar detalles sobre este posible vínculo con el empresario. "Surge necesario el llamado a prestar declaración testimonial a Charlotte Caniggia, quien fue mencionada por el comisario, como propietaria o al menos facilitadora de un departamento para que Fernando llevara a cabo operaciones (no muy transparentes), donde también podrían obtenerse no sólo elementos de interés para descubrir la verdad de lo sucedido, sino también los verdaderos móviles que llevaron a su autoría y posibles partícipes que gozan de impunidad", destacó Baños en la solicitud.
Por su parte, el letrado de la mediática, Alejandro Cipolla, aseguró que Charlotte Caniggia "no tiene ningún tipo de relación con Pérez Algaba" y sostuvo que mencionaron a su clienta como parte de una "estrategia para desviar la causa".
"Charlotte no lo conoce", precisó Cipolla en declaraciones al canal Todo Noticias (TN) y sostuvo que Córdoba mencionó a ella en su declaración para "darle validez a sus negocios turbios" y aseguró que "nombran famosos para darle credibilidad a estas estafas de criptomonedas". Aclaró que la hija de Caniggia y Nannis "no tiene una propiedad donde esta persona dice".
Respecto a la foto en la que aparece Charlotte, su novio Roberto Storino Landi y el empresario, aseguró que "se la habrá sacado de cholulo". "Quizá se sentó a comer con ellos porque los presentaron o se acercó a sacarse una foto con un famoso", evaluó.
Asimismo, sostuvo que la vinculación que se hace de su clienta "puede ser una estrategia por parte del declarante". “No creo que sea una estrategia de la familia de la víctima. Es un claro desvío de la investigación porque ahora están todos enfocados en Charlotte", concluyó.
Cómo continúa la causa
Por otra parte, se esperan los resultados de los análisis realizados a una hoja de sierra tipo amoladora dentada, tres guantes de nitrilo, un clavo con manchas hemáticas y otras cinco muestras similares en un pedazo de escombro, que fueron secuestrados luego de un rastrillaje realizado el último viernes en el predio “Renacer”, de General Rodríguez.
"La idea era poder confirmar si, tal como confesó uno de los detenidos, una de las construcciones del predio, que luego fue demolida, es el lugar del hecho, es decir la escena del crimen", dijo a Télam una alta fuente policial que trabaja en el caso.
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El mismo vocero explicó que, más allá de que ese sitio quedó destruido, el objetivo con los perros rastreadores y los expertos en rastros fue hallar algún indicio que confirme si allí fue asesinada la víctima y si en ese mismo lugar también la descuartizaron.
Nahuel Sebastián Vargas, otro de los siete detenidos por el caso, fue quien al ser indagado por el fiscal reveló que el asesinato de "Lechuga" lo cometió otro de los imputados, Maximiliano Ezequiel Pilepich, en una casa de campo de ese sitio, de dos balazos por la espalda y cuando la víctima estaba cambiando una bombita.
"En la segunda habitación a la izquierda la luz que había que cambiar estaba alta, entonces Fernando que era el más alto de los tres, toma una silla y se para en la silla para cambiar la luz", declaró Vargas. El acusado explicó que en ese momento salió del lugar a pedido de Pilepich para abrir una ventana y, en ese momento, escuchó los dos disparos.
Cuando regresó, Pilepich le dijo: "Ya está, no aguantaba más, hay límites", en referencia a que el empresario le venía exigiendo que le pague una deuda y a un hecho que involucraba a su hija adolescente.
"Maxi estaba enojado porque Fernando había agregado al Instagram a su hija de 13 años y le escribía y luego realizaba capturas de pantalla y se las enviaba a Maxi para provocarlo", contó Vargas.
Para el Ministerio Público, el crimen del empresario Pérez Algaba fue cometido por una deuda de 50.000 dólares y 17 terrenos que el imputado Pilepich debía entregarle a la víctima quien, con el fin de cobrarla, fue la tarde del 18 de julio hasta el predio "Renacer" de General Rodríguez a encontrarse con él.
Camino a ese campo, donde se cree pudo ser capturado y asesinado, "Lechuga" reconoció en un mensaje de audio que temía por su vida ante la posibilidad de ser baleado, según las pruebas aludidas por el fiscal.
El fiscal consideró que, más allá de sus negocios en común, entre Pilepich y Pérez Algaba existía "una relación de amores y odio, en la que se advierte y se puede afirmar la existencia de discusiones peleas y amenazas que se efectuaban entre ambos".
La desaparición de "Lechuga"
La desaparición del "Lechuga" fue denunciada el 19 de julio por la dueña de un departamento que la víctima había alquilado de manera temporal en el partido de Ituzaingó, quien, al no tener noticias suyas, se presentó en una comisaría para radicar un pedido de averiguación de paradero. Mientras que sus restos descuartizados fueron encontrados entre el 22 y el 24 de julio en un arroyo en Ingeniero Budge, partido de Lomas de Zamora.
Por el crimen, además de Pilepich, Vargas y Córdoba, permanecen detenidos Luis Alberto Contrera, Flavia Lorena Bomrad, Fernando Gastón Carrizo y Matías Ezequiel Gil; y a todos ellos el juez de la causa les rechazó la excarcelación.