La invasión de langostas en el norte argentino puede generar duras consecuencias para la actividad agropecuaria. Más allá de no atacar a las personas, arrasan con los cultivos de las regiones por las que pasan.
La manga de langostas se encuentra en el norte de Argentina, Brasil y unos pocos kilómetros del territorio uruguayo. En un comunicado oficial del Equipos del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y de la provincia de Corrientes, aseguraron que trabajan para dar con la ubicación exacta de la manga, ya que estiman que la misma no se ha desplazado a grandes distancias
Estos insectos ingresaron a la Argentina a finales de mayo procedente de Paraguay y, según señaló el Gobierno brasileño, está compuesta por langostas de la especie Schistocerca cancellata, que pueden recorrer hasta 150 kilómetros por día y que, en millones de ejemplares juntos, pueden arrasar con cultivos de cereales, pastos y otras gramíneas.
Esa misma especie fue la que provocó varias infestaciones en 1938, 1942 y 1946, con focos originarios de Argentina que entraron en la región sur de Brasil y afectaron a los estados de Río Grande do Sul, Paraná, Santa Catarina y Minas Gerais.