La justicia de Uruguay absolvió por falta de pruebas a un hombre apodado "El Cachila", un "cuidacoches" acusado del encubrimiento del crimen de Lola Chomnalez, la adolescente argentina asesinada en diciembre de 2014 en la playa de Barra de Valizas. De esta manera, el juez no hizo lugar al pedido de 10 años de prisión que había realizado en mayo pasado la fiscal Jésica Pereira.
"El Cachila" fue detenido al comienzo de la investigación, pero quedó libre ya que dio negativo el cotejo de su ADN con el material genético hallado en los objetos de la víctima, pero en 2019 la Justicia uruguaya lo volvió a imputar y lo detuvo como encubridor al concluir que "estuvo presente antes, durante y después del homicidio" de la adolescente.
En las últimas horas, en un fallo de 58 páginas que fue dado a conocer por El Observador, el juez Juan Letrado Giménez Vera, del 1er. Turno de Rocha, sostuvo que "no existe medio probatorio alguno en autos, que posibilite responsabilizar a M. M. el delito de ´encubrimiento´, ni de cualquier otra conducta penalmente reprochable". De esta forma, se dispuso su libertad; mientras otro sospechoso continúa preso como presunto autor del femicidio.
"No hay pruebas ni de su participación en el homicidio imputado primariamente, ni en el encubrimiento cuya condena ahora se busca", señaló el magistrado, al mismo tiempo que remarcó que, el peritaje psiquiátrico a "El Cachila", arrojó que "presenta una tendencia a la mitomanía".
"La conducta de M. M., no resulta atrapada en el tipo penal del delito de encubrimiento, dado que no conoció la existencia del delito anterior, ni ayudó, colaboró contribuyó o facilitó a su autor, con la finalidad de sustraerlo de la acción de Justicia", sostuvo el juez. Luego, refirió que el acusado dio tres versiones distintas del hecho y que su descargo en determinados tramos y cuestiones puntuales "carece de espontaneidad verosimilitud".
"La sola voz de M. M., relatando hechos poco creíbles por un lado, y contradictorios con respecto a las pruebas que se han acumulado, demuelen cualquier estructura seria que pretenda responsabilizar con certeza jurídica a una persona de la comisión de un delito", afirmó el magistrado y dispuso la "inmediata libertad en forma provisional y bajo caución juratoria" del acusado.
Crimen Lola Chomnalez: quién es el principal acusado
Por el crimen de la adolescente continúa detenido Leonardo David Sena, un hombre de 39 años quien, según el fallo de hoy del juez Giménez Vera, en su declaración dijo que no conocía al "Cachila". El imputado tiene antecedentes penales por violación y lesiones personales fue detenido en el Chuy, en el límite de Uruguay con Brasil, y distintos testigos señalaron que era frecuente verlo en la zona de Castillos y Rocha.
Sena declaró ante la fiscal del departamento de Rocha y pretendió desligarse del caso, diciendo que él estuvo en la escena del crimen, que encontró la mochila de la joven en la arena y que "solamente robó el dinero que se encontraba adentro", sin mantener contacto con Chomnalez.
Sin embargo, su ADN fue identificado en la escena del crimen. "A través de material genético pudimos ubicar a una persona, que es quien depositó su material genético, valga la redundancia, en la escena del hecho, es decir, en la toalla que estaba en el interior de la mochila que llevaba Lola en su interior el día que falleció y en su documento nacional de identificación argentino", explicó a la prensa el magistrado días después de la captura de Sena, la cual se produjo a fines de mayo último.
Sin embargo, Giménez aclaró que no puede "decir que el caso esté cerrado" ya que el acusado no admitió "haber dado muerte a Lola Chomnalez". "Está científicamente ubicado en el lugar del crimen. Reconoce haber tomado contacto con las pertenencias de Lola y que sustrae dinero de la mochila, reconoce lo que es imposible no reconocer porque la evidencia científica lo coloca en ese lugar, pero niega la autoría del crimen", manifestó Juan Willman, uno de los abogados de los padres de la víctima.