El presidente Alberto Fernández, junto al ministro de Turismo, Matías Lammens, inaugura el Hotel 6 de la Unidad Turística de Chapadmalal y visita el colectivo restaurado de la Fundación Eva Perón, que se incorpora al patrimonio del Museo Eva Perón de esa Unidad Turística. La historia del mítico predio fundado por el peronismo, clausurado por el macrismo y que vuelve a ser puesto en condiciones.
La construcción de la Unidad Turística Chapadmalal se inició en 1948 sobre terrenos fiscales y otros expropiados a la Estancia Chapadmalal perteneciente a la familia Martínez de Hoz, y finalizó en 1952, aunque la ampliación continuó hasta 1954 cuando se completó el complejo. Está conformada por nueve hoteles de tres plantas -seis de ellos ubicados sobre la costa a la vera de la ruta 11 y los otros tres del otro lado del camino que une Mar del Plata con Miramar- y 19 bungalows, que luego fueron integrados a la quinta de veraneo presidencial ubicada en el lugar.
La creación fue posibilitada por la ley 33.302, promulgada en 1945, que consistía en quitar un 2% del sueldo de cada empleado con el fin de crear un Fondo Nacional de Turismo. El predio tenía más de 3000 habitaciones, con salas de juego para niños, restaurantes y shopping. La inauguración llevaba el slogan “usted se paga el viaje, el gobierno el hospedaje".
Este proyecto lo hacemos colectivamente. Sostené a El Destape con un click acá. Sigamos haciendo historia.
Chapadmalal significa "entre arroyos" en idioma aborigen y su ocupación territorial se remonta a los primeros años del siglo XX, cuando el ferrocarril produjo su ingreso a la región oceánica. La empresa Ferrocarril Sud emplazó la estación en 1910, casi 40 años antes de la impactante obra del primer peronismo. Por aquel entonces, cada dos semanas desde el área de la Acción Social y la Fundación "Eva Perón" contingentes de 4.000 personas, en su mayoría niños y jóvenes, poblaban las flamantes instalaciones pensadas para los hijos de los obreros, según la prédica del primer gobierno peronista.
En el kirchnerismo, el predio fue utilizado para que niños conozcan por primera vez el mar y para alojar a familiares de la represión policial que hacían un encuentro anual para debatir políticas que erradiquen la violencia. Durante la gestión de Cambiemos, los hoteles 7 y 8 habían sido afectados al Ministerio de Seguridad para la creación de un centro de formación de gendarmes, pero esa medida fue revocada tras el cambio de gobierno en 2019, y las unidades regresaron a la órbita de Turismo y Deportes, en línea con el objetivo para el que fue creado el complejo durante la primera presidencia de Juan Domingo Perón.