El 6 de junio de cada año, Argentina celebra el Día de la Ingeniería en honor a Luis Augusto Huergo, un destacado ingeniero civil que dejó una huella imborrable en la historia del país. Nacido el 1 de noviembre de 1837 y fallecido el 4 de noviembre de 1913, Huergo fue el primer ingeniero civil egresado en Argentina, y sus obras y contribuciones continúan siendo reconocidas hasta el día de hoy.
Es importante diferenciar el Día de la Ingeniería Argentina del Día del Ingeniero, que se celebra el 16 de junio en conmemoración de la creación de la carrera de ingeniería en el país. El Día de la Ingeniería Argentina, por otro lado, se celebra el 6 de junio en honor al propio Luis Augusto Huergo, quien se graduó como ingeniero civil en esa fecha en el año 1870.
La jornada se estableció en 1895, gracias al trabajo del Centro Argentino de Ingenieros (CAI), que propuso conmemorar el 25° aniversario de la graduación de Huergo y así rendir homenaje a su destacada figura.
El trabajo de Luis Augusto Huergo
Además de sus logros en el ámbito de la ingeniería, Huergo fue el primer presidente de la Sociedad Científica Argentina, fundada en 1872 con el objetivo de coordinar e impulsar el desarrollo científico en el país. Su labor como político también merece reconocimiento, ya que ocupó cargos de diputado y senador por la provincia de Buenos Aires.
Pero es en el campo de la ingeniería donde el legado de Huergo brilla con mayor intensidad. Durante su carrera, realizó numerosas obras que dejaron una profunda huella en la infraestructura de Argentina. Uno de sus logros más importantes fue la construcción del "Camino Blanco a Ensenada" en los primeros años de su trayectoria profesional.
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En 1876, Huergo fue designado director de las Obras del Riachuelo, un proyecto que resultó en la construcción de un puerto de gran calado, permitiendo la navegación de barcos de mayor tamaño. Su dedicación a la navegación fluvial y marítima fue evidente, y sus contribuciones fueron fundamentales para los viajes a lo largo y ancho de los ríos argentinos.
Entre sus obras más destacadas se encuentran la canalización de los ríos Tercero, Cuarto y Quinto, así como también los estudios y diseños que permitieron encauzar el río Bermejo y habilitar la navegación desde la provincia de Córdoba hasta el río Paraná.
El legado de Luis Augusto Huergo como pionero de la ingeniería civil en Argentina es incuestionable. Sus obras continúan siendo fundamentales para el desarrollo y la infraestructura del país, y su contribución a la navegación fluvial ha facilitado el transporte y la conectividad en todo el territorio argentino.