El 17 de agosto, día del fallecimiento y paso a la inmortalidad del General don José de San Martín, es una fecha que nos invita a reflexionar sobre la vida y obra de uno de los próceres más destacados no sólo de la historia argentina, sino de América Latina. A continuación, te contamos los países que liberó San Martín y las heroicas batallas que dirigió y llevaron a estos territorios a su independencia de la corona española.
San Martín y la liberación de Argentina
José de San Martín nació el 25 de febrero de 1778 en Yapeyú, actual provincia de Corrientes, Argentina. Tras mudarse a España con su familia, se incorporó como cadete al Regimiento de Murcia en 1789, combatiendo en diversas acciones bélicas en Europa y África.
En 1811, San Martín dejó el ejército real y se trasladó a Buenos Aires, donde organizó el Regimiento de Granaderos a Caballo. Su primera victoria en tierra americana fue en San Lorenzo en 1813, y luego asumió el mando del Ejército del Norte en 1814. Designado gobernador intendente de la Provincia de Cuyo en 1814, San Martín comenzó a organizar el Ejército de los Andes, entendiendo que la incipiente independencia de Argentina estaría en peligro mientras otras regiones vecinas permanecieran bajo control español.
La gesta de cruzar la cordillera de los Andes con el Ejército de los Andes es una de las hazañas militares más destacadas de la historia, y fue fundamental para la liberación de Chile y, posteriormente, Perú. Concluida la preparación del Ejército de los Andes, San Martín inició el cruce en 1817, venciendo en Chacabuco y luego en Maipú en 1818. La victoria de Maipú aseguró la independencia de Chile, pero más allá de eso tuvo una enorme importancia en todo el continente y especialmente en Argentina.
Si bien Argentina, o en ese momento las Provincias Unidas del Río de La Plata, se había independizado formalmente del reino español en 1810, lo cierto es que todavía no estaba asegurado el dominio territorial y los ejércitos realistas seguían presentes en distintas zonas. San Martín fue clave en asegurar ese dominio geográfico y consolidar la independencia del país a través de diferentes gestas.
La liberación de Chile y Perú
Tras la victoria en Chacabuco, San Martín declinó ser el máximo magistrado político de Chile, y Bernardo O'Higgins fue escogido como director supremo. La victoria en Maipú en 1818 aseguró la independencia de Chile, y San Martín donó un obsequio recibido para fundar una biblioteca nacional.
Organizando el Ejército Libertador del Perú, San Martín desembarcó en la bahía de Paracas en 1820, iniciando su campaña en Perú. Proclamó la independencia peruana en Lima en 1821 y ejerció funciones de gobierno como Protector de la Libertad del Perú, realizando importantes reformas.
Después de entrevistarse con Simón Bolívar en 1822, San Martín renunció a sus poderes en Perú y regresó a Buenos Aires. Su vida en Argentina estuvo marcada por la hostilidad y atribuciones absurdas, lo que refleja la complejidad de su legado. Debido a esto terminó migrando a Francia, donde vivió sus últimos años.
Es también importante remarcar que José de San Martín no liberó a los países tal como los conocemos hoy con sus fronteras y límites geográficos, pero sí liberó los territorios que estaban bajo dominio español en las regiones de Chile y Perú y que hoy se corresponden con esos países. Además, su aporte permitió consolidar la incipiente independencia argentina, alejándola del peligro español en sus bordes.