En el fulgor de los años dorados del cine argentino, una figura emergió con una belleza y encanto que la hicieron merecedora del título de "la Marilyn Monroe argentina". Thelma Stefani, con su sensualidad hipnótica y su cuerpo voluptuoso, dejó una marca indeleble en una generación. Sin embargo, detrás de esa imagen de glamour y deslumbrante belleza, se ocultaban tragedia y desamor que la llevarían a un destino trágico y desgarrador.
Una belleza deslumbrante
Thelma Stefani, también conocida como "la Marilyn Monroe argentina", compartía con la icónica actriz de Hollywood más que solo una belleza similar. Ambas poseían cuerpos naturales y sin cirugías, con atributos irresistibles: un generoso busto, una cintura de avispa y caderas que hipnotizaban. Pero detrás de la apariencia había mucho más en común. Ambas sufrieron tragedias y desamor, compartieron romances intensos y clandestinos con presidentes de sus países y lucharon contra demonios internos.
Una carrera efímera y desafiante
A pesar de su indiscutible belleza y sensualidad, Thelma Stefani luchó por encontrar el éxito en su carrera actoral. Su debut en la película "Natasha" fue un trampolín temprano, pero el filme fue un fracaso tanto en crítica como en taquilla. A pesar de esto, Thelma continuó en el mundo del entretenimiento, incursionando en el teatro de revistas, donde su presencia en el escenario era hipnótica y magnética. Sin embargo, a pesar de su esfuerzo, nunca logró el reconocimiento que merecía.
Amores y desamores
Thelma Stefani siguió los pasos de Marilyn Monroe en su búsqueda de amor y estabilidad emocional. Tuvo una serie de romances y matrimonios efímeros, pero ninguno le brindó la felicidad duradera que anhelaba. Uno de los amores más conocidos y controvertidos de Thelma fue su relación con el gobernador de La Rioja, Carlos Menem, quien también se encontraba en un matrimonio tumultuoso. Aunque compartieron momentos de pasión y complicidad, su romance no estuvo exento de dificultades y desafíos.
La lucha interna y la tragedia final
Al igual que Marilyn Monroe, Thelma Stefani luchó contra sus propios demonios internos. La fama, los amores complicados y la presión del medio artístico la llevaron por un oscuro camino de autodestrucción. Combinaba antidepresivos y somníferos con prácticas esotéricas y rituales. A medida que el tiempo avanzaba, su salud mental se deterioraba, y la tristeza se convirtió en una profunda depresión.
El 30 de abril de 1986, Thelma Stefani tomó la decisión desgarradora de poner fin a su vida. Se arrojó desde el balcón de su departamento en el piso 21. Sus últimas palabras y acciones reflejaron la desesperación que la atormentaba. Su muerte dejó un vacío en el mundo del entretenimiento argentino y una tristeza que perdura hasta hoy.