Las Islas Malvinas, descubiertas por la expedición de Magallanes en 1520, quedaron bajo control efectivo de las autoridades españolas y formaron parte de la soberanía española a través de diversos tratados, como el Tratado de Madrid de 1670 y el Tratado de Utrecht de 1713. A lo largo de los siglos, la sucesión de gobernadores españoles en las Malvinas mantuvo la continuidad del control hasta 1811, cuando la Guerra de la Independencia interrumpió la administración.
La herencia argentina: ejercicio pleno de soberanía
Tras la independencia, las Provincias Unidas consideraron a las Malvinas como parte integral de su territorio, heredado de España. En 1820, el Coronel de la Marina argentina David Jewett izó la bandera argentina en las islas, tomando posesión en nombre de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Se establecieron normas y estructuras jurídicas, culminando en la creación de la Comandancia Política y Militar de las Malvinas en 1829.
El desalojo británico de 1833: acto de fuerza y ocupación ilegal
Sin previo aviso, el 3 de enero de 1833, fuerzas británicas realizaron un acto de fuerza en tiempo de paz, ocupando ilegalmente las Islas Malvinas. Expulsaron a las legítimas autoridades argentinas, llevaron súbditos británicos para poblar las islas e implementaron medidas para evitar el asentamiento del pueblo argentino. Este desalojo abrupto fue inmediatamente rechazado y protestado por Argentina.
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Reafirmación de derechos y disputa de soberanía
Desde entonces, todos los gobiernos argentinos han reafirmado de manera ininterrumpida sus legítimos e imprescriptibles derechos de soberanía sobre las Islas Malvinas. La comunidad internacional reconoció la existencia de la disputa de soberanía mediante la Resolución 2065 de la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1965. Esta resolución insta a negociaciones bilaterales entre el Reino Unido y Argentina para encontrar una solución pacífica, considerando los intereses de los habitantes de las Islas.
El llamado internacional: fin al colonialismo y negociaciones pacíficas
La Resolución 2065 adoptada en el marco del objetivo de poner fin al colonialismo en todas sus formas y manifestaciones, refleja el llamado de la comunidad internacional a proceder sin demora a negociaciones bilaterales. El objetivo es encontrar una solución pacífica a la disputa de soberanía, tomando en cuenta los intereses de los habitantes de las Islas Malvinas.
A 190 años de la ocupación ilegal británica en Malvinas, el desalojo de las autoridades argentinas sigue siendo un episodio que marca la historia de ambas naciones. La disputa de soberanía persiste, pero la llamada internacional a negociaciones pacíficas refleja la búsqueda de una solución justa y equitativa que respete los intereses de todos los involucrados.
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