Rocío Oliva, la última pareja de Diego Armando Maradona, declaró en la causa por la muerte del Diez, fallecido el 25 de noviembre del 2020. La mujer había sido citada para el 1° de septiembre, pero tuvo que reprogramarse la audiencia porque se encontraba realizando el aislamiento preventivo por el coronavirus por haber regresado de un viaje al exterior. Finalmente, Oliva asistió a la Fiscalía General de San Isidro para brindar su testimonio durante este jueves, especialmente para responder a los fiscales de la causa si ella tenía algún tipo de vínculo con Maradona pese a su separación en 2019 y también, si sabía algo sobre su estado de salud.
Durante su testimonial, Oliva aseguró que "nadie muere de amor", que ella no tuvo "nada que ver" con la muerte del exfutbolista y que en los años que convivió con él nunca presenció que haya tenido un problema de salud ya que "era un toro y siempre estaba bien".
Algunos miembros del entorno declararon en la causa que Maradona estaba deprimido por la separación con ella y hasta el abogado Matías Morla llegó a decir en una entrevista que al exfutbolista lo mataron "Rocío Oliva, la cuarentena y la parte médica". El abogado Mario Baudry, representante del hijo menor de Maradona como particular damnificado, le preguntó ayer a Oliva si sabía por qué el abogado de su expareja había dicho eso y ella respondió: "No escuché al doctor Morla decir eso. Lo desconozco".
Sin embargo, luego aclaró: "Me imagino que lo que quiso decir Baudry es que Morla dijo que una de las cosas que influyó en la muerte de Diego es que me extrañaba mucho". "Pero nadie muere de amor, y está más que descartado que no tuve nada que ver con el deceso", sentenció la testigo, según información a la que pudo acceder Télam.
La declaración de Rocío Oliva
"A Diego Maradona lo conocí en Mar del Plata, en el año 2011, y en el 2013 nos pusimos de novios y fuimos a vivir a Dubai, hasta, no recuerdo si fue a fines del 2017 o en el 2018 aproximadamente", dijo Oliva al inicio de su declaración. "En el año 2020 casi no tuve contacto con él. Desde que rigió el aislamiento por la pandemia no pude tener más contacto visual con él, más allá de algunos mensajes preguntando cómo estaba y cómo iban sus cosas. La última vez que lo vi fue cuando comenzó la pandemia", agregó.
Consultada por la salud de Maradona en sus años de convivencia, Oliva aseguró que "nunca" presenció algún inconveniente y que, por lo que ella sabía, "no tomaba ninguna medicación". Cuando le preguntaron en concreto si sabía si tenía algún problema de salud, sentenció: "En absoluto; para mí era un toro. Siempre estaba bien". Además, contó que cuando vivían en Dubai, Maradona se hacía todo tipo de chequeos que le daban "buenos resultados" y recordó que "los médicos le decían que tenía la salud de un tipo de 20 años, le decían que estaba para jugar al fútbol".
Sobre el principal imputado de la causa, el médico Leopoldo Luque, la exfutbolista profesional de River dijo que lo vio "dos veces", una en 2019 "cuando Diego regresó de México, y vivía en Tigre", y, luego, cuando "se operó la rodilla en la Clínica Olivos". Cuando la defensa de Luque le preguntó por la opinión que ella y Maradona tenían sobre el neurocirujano, Oliva contestó: "Yo ninguna porque no tenía trato, lo habré visto dos veces en mi vida. Y la verdad que tampoco sé de Diego, porque nunca hablamos de Luque".
En un tramo de la testimonial, el abogado de las hermanas Dalma y Gianinna Maradona, Federico Guntin, le preguntó si había recibido donaciones por parte de su expareja, pero ante la oposición del abogado de Luque, Julio Rivas, los fiscales le dieron la razón al considerar que no tenía vinculación con el objeto de la causa y Oliva solo dijo: "No voy a contestar esa pregunta".