El Diario Clarín despidió a Pablo Calvo, periodista de 53 años que falleció luego de una larga lucha contra el coronavirus. La noticia de su muerte se confirmó el jueves a la noche, el mismo día de su cumpleaños.
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El periodista estuvo durante 26 días batallando contra el coronavirus y finalmente, falleció. "Nunca supo dónde ni cuándo lo sorprendió el virus", afirmaron desde el medio en una nota en su honor. En principio, Calvo tuvo fiebre y decidió hisoparse. El sábado 10 de abril dio positivo y después empezó a tener falta de aire. Cuatro días después fue trasladado a terapia intensiva y no pudo ganarle al virus.
Calvo trabajaba en la revista Viva de Clarín. También estuvo en la sección de Política y el equipo de investigación del diario, en donde trabajó durante tres décadas. Desde el medio lo definieron como un apasionado de "contar historias con textos inolvidables".
Además, ganó múltiples premios en ADEPA y FOPEA, y vivió experiencias inolvidables para su carrera: recibió el diploma de finalista del Premio de la Fundación de un Nuevo Periodismo Iberoamericano de manos de Gabriel García Márquez y le escribió al Papa Francisco y recibió su respuesta, logrando entrevistarlo posteriormente.
Otra de las patas fundamentales de su vida era su equipo de fútbol. Según cuentan sus compañeros, Calvo era fanático de San Lorenzo. Incluso escribió dos libros con perlas sobre la historia del club: Dios es Cuervo y Los Tesoros del Gasómetro. También es autor de La muerte de Favaloro y Los mendigos y el tirano, sobre una emboscada a vagabundos tucumanos durante el gobierno de facto de Domingo Bussi.
“Papi no aguantó más. Se va un pedazo enorme de mi infancia pero queda todo lo que me enseñó. Te voy a extrañar siempre”, escribió poco después de la medianoche León Calvo, su hijo de 20 años con una foto de los dos con la camiseta de San Lorenzo.