Retoman la hipótesis del ataque sexual en el caso Loan y cuestionan la falta de pericias: "¿Esa línea de investigación se descartó para encubrir a alguien?"

Mientras la Cámara Federal avanza con la revisión de la investigación de la Jueza Pozzer Penzo crecen los interrogantes sobre las actuaciones en la primera etapa y la falta de datos durante las detenciones.

12 de febrero, 2025 | 18.10
Retoman la hipótesis del ataque sexual en el caso Loan y cuestionan la falta de pericias: "¿Esa línea de investigación se descartó para encubrir a alguien?" Retoman la hipótesis del ataque sexual en el caso Loan y cuestionan la falta de pericias: "¿Esa línea de investigación se descartó para encubrir a alguien?"

Desde hace varias semanas la Cámara Federal de Corrientes analiza la investigación por la desaparición de Loan Danilo Peña el 13 de junio de 2023 y se espera que en los próximos días se definan situaciones particulares de la causa, especialmente el procesamiento y prisión preventiva de los siete imputados. En esa revisión volvieron a surgir cuestionamientos que tienen que ver con las hipótesis iniciales, ya que con el correr de las últimas declaraciones parece haberse derrumbado por completo la posibilidad de que se haya tratado de trata con fines de venta y creció nuevamente la hipótesis de que la captaciones con fines sexuales es el punto central del caso. Con ese perfil resuena nuevamente la trama de la aparición o falsa aparición durante la madrugada siguiente a la desaparición y los movimientos, comunicaciones y hasta algunas pericias médicas a los detenidos.

Pocas horas después de la desaparición de Loan fueron detenidos Antonio Benítez, tío del menor, y el matrimonio amigo del hombre, Daniel Ramírez y Mónica Millapi. Fueron acusados primero por abandono de persona y hasta sorprendió que un policía que participaba de la búsqueda llamó a Millapi que estaba en la comisaría para saber cómo estaba vestido el nene. Luego los tres terminarían en el calabozo. Más allá de esa desprolijidad, surgió luego una serie de pericias realizadas entre las que había una puntual a los genitales de Benítez. Por entonces los investigadores con el apoyo del comisario Walter Maciel habían sospechado de un ataque sexual, pero ese tipo de pericia sólo se le hizo al tío y no al resto de los hombres detenidos. Ahora, parte de los investigadores y la querella se preguntan si eso no fue otro proceso de distracción y encubrimiento.

El abogado querellante Juan Pablo Gallego aseguró a El Destape que “Maciel sospechó de un abuso sexual y revisó a Benítez, pero no está claro sobre que pruebas lo hizo y por qué no examinaron a los otros”. Además, el representante de José Peña y María Noguera se preguntó “si esa hipótesis de abuso sexual era la principal en ese momento, ¿por qué se dejó de lado? ¿Fue para encubrir a alguien?”. En esa misma línea se manifestó cuando aseguró que desde la querella “tenemos el caso resuelto en un 98%” y que la jueza tiene una mirada coincidente con esa situación. Esa mirada vuelve a poner el foco en si hubo un operativo de distracción que permitiera a otros acusados “ganar tiempo” y esos otros acusados son quienes habían quedado en la zona, Laudelina Peña, Carlos Pérez y Victoria Caillava con la ayuda de Walter Maciel.

Con esa mirada vuelve a retomarse la investigación sobre los llamados y movimientos en la tarde de la desaparición de Loan. “Hay que analizar los llamados entre Laudelina y Caillava durante la supuesta búsqueda”, aseguró Gallego y se preguntó si “esos llamados tenían que ver con la búsqueda o con la posibilidad de que retorne el niño”. En esa línea insistió en la hipótesis de la sustracción que presentó las últimas semanas y donde parte de la cadena era que Laudelina le entregó el niño a Pérez y Caillava y los movimientos del comisario Maciel fueron para encubrir esas acciones. Allí se cuestiona luego si durante la madrugada el niño fue trasladado al campo y después trasladado nuevamente a un sitio desconocido. Para ello, se analizan aquellos mensajes en los que “habían encontrado a Loan” de los ya detenidos Benítez, Millapi y Ramírez, aunque luego se desmintió y ellos siguieron tras las rejas.

Allí vuelve a considerarse el rol fundamental de Carlos Pérez como el cabecilla de una banda que quizá planificó un tipo de ataque y luego se conformó otra situación. Por algún motivo, entre los cuales está fundamentalmente el miedo, no se rompió el pacto de silencio que parece reinar en la causa desde el primer día. “Pérez era o es todavía el “jefe” de 9 de Julio”, consideró el abogado Juan Pablo Gallego y destacó que “tiendo a pensar que existe un miedo reverencial a Pérez” y detalló que “de hecho cuando Laudelina, aún en una versión dudosa, mencionó que a Loan se lo llevaron Pérez y Caillava hubo un enorme operativo y despliegue que incluyó meterla presa”. Ese despliegue, explicó el querellante, tiene que ver con la aparición de quienes referían pertenecer a la Fundación Lucio Dupuy y a las hipótesis que presentó Gustavo Vera. “Estos movimientos incluyen la ayuda de la propia hija, Macarena, y hasta cambiarle el abogado por uno elegido por quienes decían pertenecer a la fundación Dupuy”, contó Gallego. Dentro de esas líneas, el representante de los padres de Loan también aseguró que “Macarena y Laudelina son artífices de la tragedia” y las ubica con una participación esencial el día de la desaparición.

Ahora, la expectativa de la querella está puesta principalmente en si la Cámara Federal ratifica finalmente los procesamientos de Antonio Benítez, Laudelina Peña, Mónica Millapi, Daniel Ramírez, Carlos Pérez, Victoria Caillava y Walter Maciel y se puede avanzar con firmeza hacia un juicio oral donde alguno de los implicados pueda romper el cerco de silencio para evitar pasar varios años en la cárcel. Además, esperan que se resuelva la situación en la causa conexa por encubrimiento y entorpecimiento de la investigación ya que la detención en otra causa de Alan Cañete, uno de los involucrados que decía pertenecer a la fundación Dupuy, explica que pese a las restricciones que ordenó la Justicia siguen delinquiendo.