Mucho cuidado: dónde poner la caja de arena de tu gato para que tenga salud y tu casa esté impecable

Saber cuál es el mejor lugar para poner la caja de arena de tu gato es fundamental para que tu mascota goce de buena salud, y al mismo tiempo, mantengas la higiene en tu hogar. Si bien los gatos son conocidos por ser animales independientes, lo cierto es que se deben seguir ciertos cuidados para preservar su salud física y mental. A su vez, estos consejos pueden ayudarte notablemente a mantener tu casa limpia y con buen olor.

Muchas personas que tienen gato no saben dónde colocar las piedritas y lo hacen en lugares como la cocina o el patio. Sin embargo, los veterinarios aseguran que estos no son los mejores lugares para que los gatos se sientan seguros, cómodos y protegidos, y que para evitar problemas en su comportamiento (como por ejemplo, que el gato rechace hacer sus necesidades allí), es mejor seguir una serie de consejos.

Dónde hay que poner las cajas de arena de los gatos, según los veterinarios

Según expertos en veterinaria, el mejor lugar para poner las piedras de tu gato es un área tranquila, como una habitación poco habitada o un rincón de la casa apartado, donde no pase nadie. Estos sitios son ideales porque al ser de poco tránsito, los gatos se sienten menos vulnerables para hacer sus necesidades tranquilos. De esta manera, se reduce su estrés, y como consecuencia, su riesgo de sufrir enfermedades. Por esta razón, los veterinarios sugieren el baño. Lo ideal es que tenga buena ventilación, para evitar malos olores.

Además, otro punto a favor es que en el baño los gatos se sienten menos observados por las visitas. Intentá que a su alrededor no haya productos químicos con olores muy fuertes o apartos ruidosos como lavarropas, que podrían estresarlos o asustarlos. También se aconseja que limpies el baño de manera frecuente y cambias las piedritas cada semana.

Cómo puedo proteger a las mascotas de la pirotecnia en Navidad y Año Nuevo

El impacto de la pirotecnia no solo se limita a los momentos en que explotan los fuegos artificiales. Si un perro o un gato se expone repetidamente a estos ruidos, puede desarrollar ansiedad crónica. Esto significa que incluso después de que termine la temporada de fuegos artificiales, el animal puede quedar más nervioso o asustado con ruidos que antes no le molestaban.

El miedo constante a los ruidos fuertes puede hacer que las mascotas sufran trastornos de conducta. Por ejemplo, los perros pueden volverse más agresivos o desarrollar fobias a otros ruidos, como el sonido de una tormenta o incluso el timbre de la puerta. Afortunadamente, hay varias maneras de ayudar a tu mascota a lidiar con el estrés provocado por los fuegos artificiales.

Consejos para cuidar a tu perro o gato de la pirotecnia 

• Creá un refugio seguro: durante los eventos con fuegos artificiales, mantené a tu mascota en un lugar cerrado, oscuro y tranquilo. Esto va a ayudar a minimizar los ruidos y las vibraciones.

• Usá productos calmantes: hay collares y sprays con feromonas sintéticas que pueden ayudar a reducir la ansiedad de tu mascota. También existen suplementos naturales que actúan como sedantes suaves. Consultá a tu veterinario sobre qué opciones son las adecuadas para tu animal.

• No los dejes afuera: si tenés un perro o gato que suele estar en el jardín o en la terraza, es mejor que lo mantengas dentro de la casa durante las fiestas. Los animales pueden intentar escapar por miedo, y van a correr el riesgo de sufrir accidentes.

• Medicamentos para la ansiedad: en casos graves, algunos veterinarios recetan ansiolíticos o tranquilizantes para ayudar a que el animal se calme. Siempre consultá a tu veterinario antes de dar cualquier medicamento a tu mascota.

• Entrenamiento y desensibilización: si vivís en un área donde los fuegos artificiales son frecuentes, podés trabajar en la desensibilización progresiva, exponiendo a tu mascota a sonidos grabados de pirotecnia a bajo volumen para que se acostumbre al ruido sin sentirse tan amenazada.