Una referente social murió por coronavirus en la villa 1-11-14

Se trata de Carmen Canaviri, coordinadora del merendero comunitario Lucecitas del Sur en el Bajo Flores. En total hay 4.286 enfermos de COVID-19 en las villas porteñas y 36 personas fallecidas.

04 de junio, 2020 | 17.37

La pandemia del COVID-19 dejó al descubierto las graves desigualdades sociales en la Argentina. Carmen Canaviri, coordinadora del merendero comunitario Lucecitas del Sur en el Bajo Flores, murió por coronavirus en el Hospital Piñero. En total, según datos oficiales, hay 4.286 enfermos de COVID-19 en las villas porteñas y 36 personas fallecidas.

Según comunicó la agrupación Barrios de Pie, la mujer de 56 años es la segunda víctima fatal de su organización ya que el 25 de mayo falleció Agustín Navarro, otro referente.

En un comunicado, destacaron que el Bajo Flores, donde está la villa 1-11-14, "es el barrio donde hay más contagios después de Retiro, también donde más muertes tenemos que lamentar".

Según los datos oficiales, el barrio Padre Mujica (ex villa 31) de Retiro concentra 1.531 casos de Covid-19, el Padre Ricciardelli (ex villa 1.11.14) de Flores un total de 810, en el 21.24 de Barracas son 317, mientras que hay 91 casos en el 20 y otros 63 en el barrio 15 (Villa Oculta), ambos de Villa Lugano.

Desde Barrios de Pie destacaron que "la pandemia recrudece los problemas que tenemos como sociedad, la pobreza, la falta de trabajo, techo y pan. Por eso necesitamos más que nunca un Estado presente que acompañe a las organizaciones populares en su valioso rol territorial".

Por eso, manifestaron que no quieren más muertes evitables porque "en la Ciudad más rica del país no puede faltar la asistencia alimentaria y sanitaria ni los protocolos adecuados ante esta emergencia sanitaria en nuestros barrios".

De este modo, manifestaron como "urgente" que el Gobierno porteño destine los recursos necesarios para atender las demandas de los sectores más vulnerables.

El lunes, la Justicia ordenó que las autoridades deben incrementar las raciones de comida enviadas a los comedores comunitarios, sean oficiales o no, y garantizar elementos de protección para enfrentar el coronavirus y el dengue, dos problemas muy comunes en las villas.