Los trabajadores de la empresa Dánica comenzaron un paro por tiempo indeterminado en la ciudad bonaerense de Lavallol y en la localidad puntana de Villa Mercedes debido a que denuncian que la empresa perteneciente al Grupo Beltrán comenzó una maniobra para cambiar el convenio colectivo de trabajo de aceiteros a alimentación. Además acusan que pese a la prohibición de despidos fueron echados dos trabajadores en los últimos dos meses y que no respetan las normas de seguridad sanitarias.
"Quieren cambiar el convenio y para intentar hacerlo amenazaron a siete trabajadores a quienes les dijeron que aceptan el cambio de convenio laboral o deberán presentar un retiro voluntario", contó a El Destape el trabajador de Dánica y secretario de acta de Sindicato de Aceiteros de Capital, Carlos Brito. El referente sindical explicó que el cambio de convenio colectivo significará una baja laboral del 50 por ciento.
Además de los despidos y el intento de cambio de convenio colectivo, el Sindicato de Obreros y Empleados de la Industria Aceitera (Soeia) señaló que la empresa quita adicionales, hace cambios arbitrarios de categoría a la baja y realiza pago de salarios inferiores a los correspondientes. "Ante la pandemia viola las normas de salud y seguridad laboral", informaron en un comunicado.
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Entre otras irregularidades, los empleados denuncian "el intento de flexibilización de tareas y de instalar la polivalencia dentro de la planta, el no pago de la escala salarial y sumas de los acuerdos paritarios, el hostigamiento y persecución a trabajadores". Además señalan que la firma se ausentó en las reuniones de mediación convocadas por el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires.
"No es legal ni legítimo el cambio de convenios", afirmó a El Destape el secretario general del gremio de los Aceiteros, Daniel Yofra, quien además contó que la empresa había acordado no despedir personal en un acta, sin embargo incumplió la promesa. "No corresponde que una empresa que hace 70 años es aceitera pase a alimentarios, porque se lo ocurre a unos empresarios que llegaron ahora", sostuvo Yofra.
Los trabajadores afirman a El Destape que "la firma desde el inicio de la cuarentena contrató nuevos empleados, pero bajo condiciones precarias y eventuales, modalidad que pretende instalar dentro de planta". Además sostienen que desde que el Grupo Beltrán adquirió la firma a principios de 2019 viene atacando el CCT 420/05 fundado en una supuesta "crisis" que la empresa nunca demostró, pese a los requerimientos del Ministerio de Trabajo.
En marzo, cuando apenas inició la pandemia del coronavirus, la empresa Dánica había echado a cinco trabajadores y había cerrado "hasta nuevo aviso" la planta que tiene en Lavallol.
Los empleados explican que el conflicto comenzó en mayo de 2019 cuando la firma los obligó a una reducción salarial debido a la crisis económica que atravesaba el sector por la caída del consumo. Eso llevó a un reclamo de los trabajadores que hicieron un paro y que tuvo como represalia el despido de 33 empleados, de los cuales luego fueron reincorporados 18.
En diciembre pasado, los obreros denunciaron que la empresa propuso reducir el pago de aportes previsionales y obra social a cambio de abonar las horas extra y los gastos que adeudan. La empresa tiene más de 150 empleos directos. De ellos 109 están afiliados a aceiteros, 30 son superiores y 15 administrativos. Además emplean a una firma tercerizada de maestranza.
En su mejor momento, la empresa contó con más de 360 trabajadores, detallan desde el Sindicato de Aceiteros.