Pese al DNU, el 44% tuvo que pagar el alquiler en efectivo y uno de cada dos tiene dificultades para abonar junio

Los senadores opositores bloquearon el tratamiento de la nueva Ley de Alquileres y todavía no se confirmó su debate esta semana.

08 de junio, 2020 | 16.39

Mientras se espera que el Senado se apreste a debatir y sancionar la nueva Ley de Alquileres, la situación de los inquilinos durante la pandemia sigue siendo grave. No sólo gran parte de las inmobiliarias y propietarios no proporcionaron un medio de pago electrónico, como indica el Decreto de Necesidad y Urgencia firmado por el presidente Alberto Fernández, sino que uno de cada dos manifestaron tener dificultades para abonar el mes de junio debido a la crisis económica.

Una nueva encuesta nacional de Inquilinos Agrupados reveló que el 49% de los inquilinos de todo el país tiene problemas para pagar el alquiler de junio. Si bien es una estadística preocupante, mejoró respecto del mes pasado debido a las aperturas de algunas actividades en todo el país pero es de destacar que un 68% de los consultados manifestó tener menos ingresos o haber dejado de percibirlos.

Por otro lado, pese a que el DNU 320/20 estipuló la facilitación de un medio de pago electrónico para evitar el tránsito en las calles, el 44% de los encuestados abonó el alquiler en efectivo, lo que marca un mercado que continúa funcionando en negro. Por eso, pese a que el proyecto de la senadora María de los Ángeles Sacnun no se debatió en comisiones, desde la agrupación exigen la prórroga del Decreto hasta el 31 de marzo ya que actualmente sólo será efectivo hasta el 30 de septiembre. No sólo por la forma de pago sino también por las suspensión de los desalojos.

Este proyecto lo hacemos colectivamente. Sostené a El Destape con un click acá. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE

Fuente: encuesta nacional de Inquilinos Agrupados.

En este sentido, es preocupante que el 33% de los encuestados manifestó haber sufrido algún tipo de violencia por parte de las inmobiliarias o propietarios al querer hacer cumplir la ley. Es que la situación puede volverse dramática si se tiene en cuenta que un 68% dejó de percibir ingresos (20%) o los mismos son menores (48%).

Según el relevamiento, sólo el 49% de los inquilinos tiene un trabajo formal con un sueldo en blanco y aportes, mientras que por fuera de este sistema está 40%, contando a los informales, economía popular, monotributistas y autónomos. Estos sectores tienen mayores trababas para acceder al mercado inmobiliario. El 11%, en tanto, se encuentra desempleado y un 46% de los hogares e perdió al menos uno de los ingresos.

Fuente: encuesta nacional de Inquilinos Agrupados.

Mientras tanto, se espera que el Senado trate y sancione la nueva Ley de Alquileres. El jueves, la oposición bloqueó su debate amparándose en un tecnicismo: el dictamen de la ley que ya tiene media sanción en Diputados se había firmado hacía sólo dos días, por lo que entró sobre tablas. Para habilitarlo en el recinto, se necesitaban los dos tercios de los votos pero el sector contrario al Gobierno y a garantizar mayores derechos definió bloquearlo. Si bien aún no está confirmada la sesión de esta semana, los legisladores son optimistas.

La acción de Juntos por el Cambio se explica en la necesidad de mostrar cierta cuota de poder y enviar un mensaje: al oficialismo se le va a complicar avanzar con iniciativas que necesiten los dos tercios de los votos. Estaban molestos porque el Gobierno envió el DNU macrista que transfirió las escuchas a la Corte Suprema de Justicia, algo que se rechazó en el recinto y definirá Diputados.

Gervasio Muñoz referente de Inquilinos Agrupados manifestó: “Hace 5 años venimos planteando la necesidad de una ley de alquileres para la argentina. Necesitamos que esta semana se vote la ley en el senado y se extienda el decreto hasta marzo del año que viene. Somos 9 millones de inquilinos e inquilinas que esperamos alquilar de forma justa. Hace 36 años que el Congreso no discutía una ley de alquileres. Las organizaciones estamos logrando una ley histórica”. 

Las claves del proyecto:

Regular el precio por un promedio entre inflación y salario, con actualizaciones anuales, ya no semestrales para finalizar con la arbitrariedad de los mismos.

Regular expensas, para que los inquilinos no paguen arreglos que no le corresponden.

El contrato pasa de dos a tres años.

* Establece la obligatoriedad de registrar todos los contratos de alquiler por AFIP para terminar con la clandestinidad.

El depósito será de sólo un mes por los tres años al valor del primer alquiler, con el fin de evitar el pago de altas sumas de dinero al ingresar a una vivienda.

* Para las refacciones de la vivienda se facilita la posibilidad de que los inquilinos puedan hacer los arreglos y descontarlos del alquiler.

El inquilino no está obligado  a pagar tasas e impuestos que gravan la propiedad como el ABL, ARBA u otros.

* Los propietarios deben avisar con tres meses de anticipación si deciden no renovar el contrato.

* Se crean organismos de control y defensa de los derechos de los inquilinos en todo el país.

* Cambiemos incluyó dos artículos problemáticos: uno que habilita los desalojos exppess en diez días en caso de falta de pagos y otro que hace ingresar a los bancos a la intermediación del alquiler como garantes.