Un caso positivo en el Servicio Penitenciario Provincial, ubicado en el departamento Chimbas, terminó en brote de contagios esta semana, en San Juan. Las autoridades pudieron controlar la situación, pero los desmanes terminaron perjudicando a los reos por la quema del mobiliario. Según manifestaron a El Destape, “todo se calmó sin ninguna negociación extrema, ni se llegó a una instancia de extrema violencia”, pero la tensión reinó por algunas horas.
Todo comenzó cuando uno de los internos manifestó síntomas de Covid 19. El equipo sanitario dispuso las medidas que corresponden al Plan ante la Posible Circulación Viral, que realizan a su vez en barrios y zonas afectadas por algún contagio - en toda la provincia - para controlar los brotes. Sin embargo, los contagios se produjeron de forma sistemática. Sumaron casi 300 (sobre unos 1700 reclusos) en pocas horas y eso alteró los nervios de los internos.
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Hubo incendios en los pabellones 5 y 6, y un foco que se extendió al exterior del patio. Si bien la quema de colchones provocó bastante humo, pudieron ser controlados los focos y no hubo gente intoxicada. Un penitenciario terminó con quemaduras cuando abrió la puerta de auxilio para socorrer a los internos. Sufrió heridas en el rostro y en sus brazos, pero está fuera de peligro. También, hubo heridos por los enfrentamientos entre los que estaban de acuerdo (siete internos identificados) y los que no, por generar los focos. Todo fue controlado a las pocas horas.
Los contagios se generaron en los sectores mencionados, que son dos pabellones que se encuentran a 800 metros de la Alcaldía de Mujeres y del sector de presos federales, por lo cual estos dos últimos bloques no tuvieron contagios aún. La razón por la que el virus no se propagó es porque los reos, desde que se retornó a la fase 1, mantienen suspendidas las visitas higiénicas y personales entre presos de pabellones distintos. Tampoco tienen visitas de familiares ni salidas transitorias.
¿Cómo se ocasionó el brote?
La respuesta es incierta por estas horas. Hay hipótesis, pero no hay nexo epidemiológico definido hasta el momento. Tampoco se sabe si el primer interno en manifestar síntomas fue realmente el primer contagio, porque hay un alto porcentaje de asintomáticos.
En el interior de la cárcel de San Juan hay una especie de “hospital de campaña” para los internos que presenten síntomas leves a moderados de Covid-19, que necesiten asistencia médica. En ese sector hay 40 camas y actualmente está siendo ocupado por 12 pacientes.
Mientras tanto, continúan los hisopados de PCR para cada sector. Lo establecido por el plan sanitario provincial, que rige en todos los casos en la provincia, es que ante una comunidad cerrada (ejemplo, vivienda familiar) con solo un caso, se reconoce a todo el grupo como “contagiado”. Esto es válido para el penal, también. Ante una comunidad cerrada (celdas) se han reconocido varios contagios inminentes.
La detección y el control de brote está siendo realizado de manera progresiva, para tranquilidad de las familias y de los internos, según manifestó a El Destape, el director del Servicio Penitenciario de San Juan, Javier Figuerola. En pocas horas se efectuaron 350 hisopados y siguen realizando a un grupo de 900 internos del sector 1. En las próximas horas, continuarán con el rastrillaje de casos, pero por el momento predominan los asintomáticos.