Las residencias “Eva Perón” de Burzaco y “San José” en San Martín, dependientes de la Dirección Nacional de Política Pública para Adultos Mayores del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación comenzaron el 13 de marzo un proyecto solidario que trata que los adultos y adultas residentes confeccionen tapabocas para otras instituciones.
“Es una forma que, en medio de tanto encierro debido a la pandemia y por los protocolos de seguridad, ellos y ellas tengan un contacto con el exterior de manera segura y cuidada”, comentó a El Destape, Claudelina Pavón, trabajadora social de las residencia “Eva Perón” y una de las impulsoras del proyecto solidario.
Vale remarcar que todos los adultos y adultas mayores de ambas instituciones están vacunadas con las dos dosis de la vacuna Sputnik V, así como también los y las trabajadoras de las instituciones.
En el centro de estadía de Burzaco trabajan 8 mujeres y 6 hombres en el proyecto, y en el de San Martín 6 mujeres más. Entre ellos y ellas confeccionaron más de 800 tapabocas. “Debido a sus condiciones motrices y a los protocolos que tenemos, que hace que trabajen con distancia, los y las residentes marcan los modelos de los barbijos en la tela y los cortan”, explicó Claudelina y agregó que, en segunda instancia, “hay mujeres que están fuera de la institución y se encargan de coserlas y terminarlas”.
Los barbijos se confeccionan con telas donadas y con friselina en su interior. “Son iguales a los que se consiguen en los kioskos”, detalló la trabajadora social. El 21 de julio se realizará la entrega formal de los tapabocas a diferentes instituciones como un club de fútbol en San Francisco Solano y el Hospital Lucio Meléndez de Burzaco.
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“Es un contacto con el exterior en medio de esta pandemia que justamente restringe el contacto entre las personas. Es un vínculo con el afuera y un trabajo solidario hacia la sociedad que genera una devolución de la gente y que hace que el proyecto no quede entre las residencias y nada más”, expresó Claudelina Pavón y señaló que “fue un trabajo realizado por personas que tienen alguna limitación motriz de la edad, o padecen alguna enfermedad pero lo hacen con amor”. Las cuidadoras del hogar también participaron. El proyecto apunta a buscar herramientas y alternativas para sobrellevar el aislamiento y la pandemia en las residencias mencionadas.