Joaquín y Juan Ignacio Madeira son mellizos, tiene 16 años y viven en Villa Devoto. Interesados por la ingeniería electrónica, la robótica y la programación, crearon un dispositivo para que se respete la distancia social de 1,5 o 2 metros que es la recomendada para evitar los contagios de coronavirus.
Ambos cursan el cuarto año del secundario y en plena pandemia, el tiempo libre abunda. El dispositivo funciona a través de un sensor de ultrasonido que marca cuando una persona no respeta la distancia de dos metros, que es la distancia recomendada para evitar la propagación del virus.
Lo que empezó como un proyecto para un curso, hoy se comercializa en Mercado Libre y en la página Laser Desing y es de gran ayuda para los comercios y empleados que trabajaban en atención al público.
En una entrevista con El Destape, Joaquín relató: “El proyecto surgió porque teníamos tiempo libre. Teníamos cosas para hacer del colegio, pero nos sobraba tiempo. Mi hermano y yo nos encaminamos a seguir ingeniería porque nos gusta todo lo relacionado al futuro. A mi hermano le surgió hacer un curso de programación, a mí mucho no me gustó y me empecé a preguntar qué otro tipo de ingeniería y me interesó la ingeniería electrónica y mecánica”.
Con el objetivo claro sobre el tipo de ingeniería que quería especializarse, Joaquín encontró un curso de iniciación de robótica y electrónica. Ambos hermanos se anotaron y el proyecto final era confeccionar un dispositivo y la idea de pensar qué crear y para qué, les llevó alrededor de dos meses.
“Para el curso teníamos que presentar un proyecto final y veíamos que los casos iban en aumento, pero que los comercios abrían cada vez más entonces pensamos ¿Qué podemos crear? Y a mi hermano se le prendió la lamparita de crear algo que sea de ayuda para el trabajador, para que se mantenga la distancia con el cliente y que se cuiden todos”, explicó el joven.
¿Cómo funciona?
El dispositivo tiene una medida media (17cmx7,5cmx26cm) que no resulta invasivo para el mostrador y funciona a través de “un sensor de ultrasonido que emite ondas de sonido, entonces, cuando se encuentra con un cuerpo, rebota y lo vuelve a recibir y ahí, mediante la programación que tenga, si no se respeta la distancia marcada, se enciende la luz roja”. Su carga es a través de USB
“La idea es que se ponga en el mostrado y cuando la persona se acerca mucho, se prende de color rojo (para alertar al vendedor y al cliente) y de forma amigable se le pide que vuelva para atrás hasta que se vuelva de color verde”, explicó Joaquín.
Hace pocas semanas que los mellizos terminaron la producción del dispositivo. Por el momento, se lo encuentra en Laser Design.