Desde PBA ya aseguran que "la semana que viene habrá más casos" de coronavirus

"Tenemos que seguir cuidándonos. Veo que hay gente que directamente no usa el barbijo", remarcó un funcionario de salud provincial.

16 de diciembre, 2020 | 08.34

El jefe de Asesores del Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, Enio García, se refirió a la suba de casos de coronavirus en los últimos días: "Veníamos con una baja sostenida de casos y ahora eso se revirtió, aumentaron los ingresos a terapia por COVID".

En declaraciones a El Destape Radio (FM 107.3), el funcionario destacó: "La semana que viene habrá más casos. El aumento de todos los indicadores nos prende una luz de alerta. La estacionalidad juega. Los virus respiratorios son estacionales, pero no cambia, lo que cambia es nuestro comportamiento en el verano".

En ese sentido, agregó: "Tenemos que seguir cuidándonos. Veo que hay gente que directamente no usa el barbijo. Si no aprovechamos el verano para cuidarnos vamos a quedar mal parados para una segunda ola de coronavirus.

"Está bien que después de un año tan difícil la gente busque un esparcimiento, pero hay que marcar las recomendaciones para cuidarse", añadió. Asimismo, García indicó: "Los municipios son los que tienen que estar encima. En la Costa había poca presencia y mucha gente sin barbijo. 

"Si la situación empeora no hay que esperar a febrero o marzo para tomar medidas más restrictivas. Si vemos que curva empieza a crecer y el sistema de salud empieza a estar en riesgo no hay ninguna duda de que se van a tomar decisiones restrictivas".

Habilitan fiestas de hasta 200 personas

El jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco, se refirió a las fiestas clandestinas en la provincia de Buenos Aires y afirmó que, en los próximos días, “vamos a presentar un protocolo para realizar eventos nocturnos”.

En las últimas semanas desde el ministerio de Seguridad bonaerense, desactivaron cerca de 100 fiestas clandestinas que, sobre todo, se realizaron en el conurbano. Algunas superaban la concurrencia de más de dos mil personas sin ningún tipo de cuidado. La mayoría eran realizadas por jóvenes de entre 18 a 30 años.