Después de ochenta días de cumplir con el aislamiento social preventivo y obligatorio, este lunes a las ocho de la noche se levantó la cuarentena para quienes deseaban salir a hacer running o caminatas por las plazas de la Ciudad de Buenos Aires.
Aunque el Ministerio de Salud confirmó que en las últimas 24 horas se sumaron 29 muertes, es decir, el día que más fallecimientos se produjeron desde que llegó la enfermedad, sucedió algo insólito: miles de personas infestaron las calles sin cumplir siquiera con los recaudos mínimos necesarios como el distanciamiento.
Las reglas impuestas por el decreto, y que el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta publicó como protocolo, son claras y difieren según la actividad de la que se trata: para correr, se establece la prohibición para hacerlo en grupo -solo acompañado de hasta una persona- y en un perímetro cercano al hogar.
Para las caminatas, hay que mantener por lo menos cinco metros de distancia, mientras que para el running lo indicado son 10 metros. Para andar en bicicleta hay que dejar un espacio de 10 a 20 metros, según la velocidad del rodado, y para desplazarse con rollers o patines, también 10 metros. En cuanto a la distancia lateral entre una persona y la otra, deberá haber dos metros de distancia.
Nada de esto se cumplió en lugares como el Parque Tres de Febrero en Palermo o el Parque Centenario, donde no sólo había mucha gente cerca, sino que ni siquiera se podía circular con normalidad.
Cientos de videos y fotos invadieron las redes sociales denunciando la situación que alarmó a los vecinos.