Fuentes vinculadas a la producción de la vacuna de la Universidad de Oxford y AstraZeneca aseguraron a El Destape que continúan con sus planes de producción luego de que el laboratorio pusiera en pausa las pruebas de su vacuna contra el COVID-19 por sospechas de que causó reacciones adversas graves en un participante del estudio, informó esta tarde el sitio especializado en noticias médicas StatNews, citando fuentes de la empresa.
Ante la conmoción que causó la noticia, Leandro Cahn, director Ejecutivo de Fundación Huésped, explicó en su cuenta de Twitter que "esto es algo que puede suceder en un estudio así, y ahora el comité de seguridad del estudio va a analizar el caso para recomendar cómo seguir. Por estas cosas decimos, también, que las vacunas son seguras y por eso es importante culminar los ensayos clínicos". Por eso, pidió no entrar en la desesperación.
La vacuna, desarrollada en conjunto con la Universidad de Oxford, era considerada hasta hoy la más avanzada de las nueve que se encuentran en estadio avanzado de desarrollo y se esperaba que estuviera lista para comienzos del 2021.
Más allá de lo anunciado, la compañía aseguró que está “trabajando para acelerar la revisión de este evento singular de forma tal de minimizar cualquier impacto potencial en la línea de tiempo” de la vacuna, que en caso de ser aprobada se va a producir entre Argentina y México para toda la región. La línea de tiempo apuntaba a tener las primeras dosis listas en el primer trimestre del año que viene. No es posible, con la información que existe hasta ahora, calcular cuánto pueden demorarse estos planes.