El primer día de la nueva etapa del aislamiento social, preventivo y obligatorio encuentra a la zona del AMBA con mayores controles, sobre todo en los ingresos a Capital Federal y en el interior del conurbano bonaerense. La medida estará vigente hasta el 17 de julio y busca empezar a bajar el pico de contagios antes de que se sature el sistema de salud.
A diferencia de las anteriores etapas de la cuarentena, inclusive en la del inicio, esta vez los controles comenzaron desde la madrugada de este miércoles primero de julio. Los puntos en los cuales más autos se concentraron por los controles fueron en el Puente Pueyrredón y en Puente La Noria, donde desde temprano se registraron demoras de hasta una hora para poder pasar. Otro de los puntos donde se registraron demoras importantes en el inicio del día fue en la Panamericana, donde en los peajes se controló auto por auto.
La fase de la cuarentena en el AMBA durará 16 días, e incluye cierre de actividades no esenciales que habían sido autorizadas a funcionar, como así también la prohibición de la actividad física al aire libre y el uso de transporte público de manera habitual por parte de los no esenciales y la posibilidad de bloqueo de la tarjeta SUBE para quienes no cumplan con las normas.
A diferencia del aislamiento estricto que se dispuso el 20 de marzo, en esta ocasión los bancos y algunas actividades industriales de la provincia de Buenos Aires sí están autorizados a funcionar.
También se incrementaron los controles en los ingresos a las estaciones de trenes del AMBA, más los habituales de las cabeceras de Once, Constitución y Retiro. A diferencia las fases anteriores de la cuarentena, esta vez también en el interior de los municipios del conurbano bonaerense hubo controles para automóviles y transporte público.
En varios de los controles del conurbano, según pudo constatar NA, la policía solicitaba los permisos pero sin disponer de la posibilidad de escanear los códigos QR con los que cuenta la aplicación CUIDAR.