Los científicos aseguran que la actividad física es esencial para la salud. Lo que no se consideró de la misma forma durante estos cinco meses de aislamiento es el gimnasio, debido al riesgo de transmisión de Covid-19 en los espacios compartidos. Luego de rehabilitar varias actividades deportivas en clubes e instituciones privadas, como atletismo, tenis, paddle, canotaje, pelota paleta y grupos de corredores, entre otras, y ejercicios al aire libre, la mira está en el consenso entre el gobierno provincial, porteño y los gimnasios para que estas instituciones logren reabrir sus puertas.
“Se estima que hay 8000 gimnasios en todo el país. El 99% son pymes, empresas nacionales, unipersonales o familiares. Es una actividad que está muy atomizada”, contextualizó Fernando Storchi, presidente de la Cámara de Gimnasios Argentina (CGA) y fundador de Megatlon. De ese total, afirmó que 1000 centros cerraron y otros redujeron el personal -Storchi reconoció que es una actividad “con bastante informalidad”, lo cual “se complicó registrar los despidos”- pero que, a lo largo del país, donde la circulación del virus es menor, “alrededor de 4000 ya lograron retomar actividades bajo estrictos protocolos” Entonces, como la gran mayoría, las actividades deportivas denotan la mayor pérdida económica en el foco más problemático: el AMBA. Solo en CABA, según datos provistos por la CGA, hay 1352 establecimientos, lo que implica 17.000 empleos directos y una facturación anual sólo por membresías de $9.300.000.000.
La fecha: el dato que más tiene en vilo a los socios
El mes tentativo para retomar las actividades es septiembre, pero no en esta nueva fase de aislamiento anunciada por el presidente Alberto Fernández, el jefe de gobierno provincial Axel Kicillof y el mandatario porteño, Horacio Rodríguez Larreta. Desde la CGA suponen una fecha cercana al 15. En tanto Emiliano Maccarrone, gerente zonal de Sportclub, estipuló la reapertura entre el 14 y 28 del mismo mes. “Necesitamos que se abran ya, es un reclamo cada vez más fuerte que se está haciendo porque la gente lo necesita y lo podemos hacer de manera segura”, alegó Storchi. Por su parte, desde el Gobierno de la Ciudad aseguran que no está fijada una fecha para la reapertura por el alto nivel de contagios detectados, aunque sí aseguran que “hace tiempo estamos hablando con los gimnasios para que puedan reanudarse con características especiales”. “Para todos es difícil, pero esto es una pandemia y la prioridad es garantizar la salud”, determinaron desde CABA y agregaron: “Lo que se abrió fue porque los datos mostraron que se podía hacerlo. PBA va a mantener la misma lógica con respecto a este sector.” Por otra parte, desde el gobierno porteño no especificaron si habrá medidas nuevas para estos centros que aún no mantienen un día y horario específico para reactivar su actividad presencial.
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Protocolos en las actividades: los puntos centrales
Mientras tanto, la CGA ya presentó su protocolo, firmado por el equipo de infectólogos del Centro de salud Stamboulian, frente al Ejecutivo, el Ministerio de Deportes y el Ministerio de Desarrollo Económico de CABA. “Estamos convencidos de que es un protocolo ordenado y seguro. En el resto del país no hubo situaciones de contagio con este sistema. Hay mucho prejuicio y eso nos cuesta vencer. En el fondo, nadie nos dice por qué no podemos abrir. No podemos racionalizar la discusión”, enfatizó Storchi.
La semana entrante habrá otra reunión para avanzar en el consenso sobre la reapertura de las sedes en la próxima fase de aislamiento.
Para retomar actividades se busca que los centros logren abrir todos los días en horario habitual. Sin embargo, la primera novedad de los lineamientos generales del protocolo es el sistema de turnos. Maccarrone cree que serán 45 minutos por persona -reservado previamente- y 15 se destinarán a la limpieza del área utilizada. No supone que las clases deportivas vuelvan en lo inmediato, aunque el fundador de Megatlon lo ve más posible “si se marcan espacios de 4 metros cuadrados y no sean de alta intensidad” tal como pilates, yoga o stretching. El distanciamiento social es el pilar fundamental de este y cualquier protocolo, aunque para ejercitarse se necesitarán más de dos metros.
Desde la CGA agregan que la redistribución del equipamiento, ventilación natural (no ventiladores), estricta desinfección, control de temperatura en la entrada y uso de máscaras, en tanto no se realicen actividades que generen transpiración, serán principales cuestiones a tener en cuenta. Con respecto a los natatorios, el organismo afirmó: “Por el momento no está demostrada la transmisión del virus a través del agua”, así que se prevé la vuelta a nadar con 2 metros de distancia.
“El sistema de turnos nos reduce la capacidad del gimnasio a un 40% o 50%. Es muchísimo, pero también hay que empezar a reactivar la rueda”, reconoció el gerente de SportClub. El dueño de Megatlon estima un uso entre el 20% y 40%, un margen menor. “Me imagino por lo menos 6 meses más con mucha dificultad”, lamentó.
Llevar adelante una empresa en medio de una pandemia: el ejercicio para el cual no hubo entrenamiento
Javier Goldfeld, también integrante de la CGA y dueño de la cadena Open Park, admitió que “nunca había vivido algo parecido”. “Hemos suspendido servicios, renegociado alquileres y postergado todo tipo de inversiones. Aún así hay pérdidas cada mes” En la misma línea Storchi agregó que un porcentaje marginal de gimnasios “debió vender aparatos para sostenerse” y que la mayoría se endeudó. Otro de los elementos centrales en el sostenimiento de estos centros es la nómina de socios: es claro que muchos, ante la necesidad de recortar gastos, decidieron no abonar por un servicio que no pueden utilizar. “La baja de socios puede estar cerca del 70%-75% en líneas generales”, reconoció. Es una cifra impactante que, por supuesto, repercutió en la recaudación, de acuerdo a todos los entrevistados. Particularmente en Open Park, Goldfeld estimó que un 50% de los afiliados decidió no pagar más la cuota y otro 50% paga “una cuota de mantenimiento mínimo” para acceder a servicios online, modalidad que reconoce “mantuvo altos niveles de uso”. Maccarrone, en tanto, dijo que menos del 50% prescindió de los servicios en Sportclub. Actualmente, el dueño de Open Park ofrece beneficios, como la reducción de la cuota hasta fin de año o planes anuales para 2021, abonado en 12 cuotas y con un 35% de descuento. Por su parte, Sportclub propone un 40% de descuento en los pagos mensuales y un 30% luego de la pandemia de por vida en su Plan Life "a modo de agradecimiento”. Es que mantener al público vigente es importante para la salud económica de los gimnasios, pero también para hacer frente a los sueldos de los profesores que continúan dando clases de manera virtual. Para lograrlo, todos los directivos hicieron uso del ATP. “El ATP es el programa más importante pero insuficiente, porque los ingresos se perdieron y los gimnasios tienen una estructura de costos fijos muy altos”, dijo Storchi.
Entrenamiento virtual, la modalidad que llegó para quedarse
Tanto Sportclub como Megatlon y Open Park aseguraron que los entrenamientos luego del aislamiento serán mixtos: presenciales y virtuales. “A la gente le gustó mucho y no todos van a poder volver a entrenar, así que lo continuaremos”, dijo Maccarrone y Storchi agregó: “Arrancamos un programa para la población en general en Instagram y pasamos de tener 40 mil seguidores a 210 mil. Seguiremos manteniéndonos activos con nuestros clientes.”
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