Las últimas cifras que brindó el Ministerio de Salud revelaron una preocupante realidad. Argentina pasó el millón de casos de coronavirus desde que llegó la enfermedad. En términos de números, el país está ubicado dentro del top ten de los países que más casos tuvieron. Sin embargo, el sistema de salud logró evitar el colapso. ¿Cómo se logró?
En diferentes puntos del mundo, el principal problema que tuvieron los sanitaristas fue la necesidad de tener que elegir entre pacientes. Italia, España, Francia y hasta Chile -entre otros- vivieron momentos dramáticos al tener que elegir quiénes eran los pacientes más aptos para recibir tratamientos y poder sobrevivir. Los respiradores no alcanzaron para todos. En Argentina, el manejo de la pandemia fue distinta y esos casos nunca llevaron a que se tenga que elegir quien vive y quien muere. "No colapso el sistema de salud porque evitamos que se contagien todos juntos al mismo tiempo. Se prorrateó, digamos, el número de casos y evitamos que se contagien todos juntos, entonces eso nos permitió darle tratamientos a todos", sostuvo a El Destape Lisandro Bonelli, Jefe de Gabinete del Ministerio de Salud.
En septiembre, el Ministerio de Salud había informado que, hasta esa fecha desde marzo, invirtió 42.000 millones de pesos (unos 536 millones de dólares) para expandir el sistema sanitario y poder hacer frente a la pandemia de la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19). Ese crecimiento en la inversión fue parte de la estrategia de generar un sistema robusto que pueda entregarle un trato justo a cada paciente.
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Hasta el momento el porcentaje de ocupación de camas a nivel nacional nunca llegó a estar cerca del 70%. Incluso, más allá de la complicada situación que se vivió en el Área Metropolitana de Buenos Aires, en la que hubo un incremento de camas y unidades de terapia intensiva, el porcentaje nunca sobrepasó el 70% en total. En este punto, el país contó con la oportunidad de que la pandemia fue pasando en todo el mundo y se pudo observar cómo ataca el virus. "Nosotros viendo veníamos corriendo de atrás. Y vimos lo que pasó, especialmente, con la ciudad de Nueva York, que no les dio para las camas. Y que, cuando se dieron cuenta, tenían un nivel de contagio altísimo", indicó Bonelli.
En Argentina, por ejemplo, los números en el foco más complicado del COVID-19, en el AMBA, comenzaron a bajar en las últimas semanas. "En el AMBA los números se vienen aplanando, y vienen mostrando una mejoría. Eso es algo bueno", indicó y, además, reveló que "no se animaría a decir cuando se va a ver un fuerte deceso en caso a nivel país" pero que en las grandes metrópolis se puede controlar. Más allá del caso en Argentina, en diferentes países de Europa, con el invierno avecinándose, la cantidad de casos comenzó a ir en aumento nuevamente. Si bien el frío no es un factor de contagio en si mismo, las actividades dentro del hogar y el incremento de las enfermedades respiratorias hacen que el coronavirus resurja.
Al 19 de octubre, Argentina tiene 589 muertes por cada millón de habitantes. Y, a diferencia de otros países, está por debajo del top de otros países. Naciones europeas como España, Bélgica, Suecia, Italia y Gran Bretaña, que vieron colapsados sus sistemas de salud, lo pasan en cantidad de fallecidos por cada millón de habitantes. Incluso, estos países, en el inicio de una segunda ola que preocupa a todo Europa, ya están muy por encima de los números que maneja Argentina.
Bélgica, por ejemplo, tiene 897 muertes cada millón de habitantes, España ronda los 727, Gran Bretaña 624 e Italia los 606. También, por supuesto, Estados Unidos se encuentra en 679 decesos cada millón.
Este número asusta y llama la atención por la espectacularidad de la cifra. Sin embargo, los datos muestran que hay mejorías en los centros más densamente poblados. En este sentido, Bonelli sostuvo que "los riesgos de colapso siempre están", pero todo queda "supeditado a la estrategia". Sobre ello, añadió que se pudo coordinar una mayor cantidad de testeo, pero que también es importante que "la responsabilidad individual" logre comprenderse. A partir de esos recaudos "la situación va a tender a mejorar mucho más"
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