El pasado martes, la cabaña que alquilaba Marcelo Quirici (60) se prendió fuego y el hombre resultó con graves quemaduras en sus brazos y piernas que motivaron su traslado a la ciudad de Córdoba, donde murió dos días después.
La tragedia ocurrió en el loteo Arroyo del Sauce, en cercanías del paraje Umepay, en el valle de Calamuchita. La víctima, un directivo de la Bolsa de Comercio de Rosario, había sido derivado al Instituto del Quemado en la capital, donde permaneció hasta que se produjo su deceso.
La principal hipótesis apunta a una explosión en un termotanque que se encontraba en el inmueble, aunque se esperan conclusiones de los peritos para identificar qué ocasionó el estallido. Cuando los bomberos llegaron al lugar, se encontraron con la vivienda envuelta en llamas y el hombre con gran parte del cuerpo quemado.
Quirici fue trasladado de urgencia al Hospital Eva Perón de Santa Rosa de Calamuchita, desde donde decidieron su derivación al Instituto del Quemado de Córdoba a raíz de la gravedad de las heridas. "Presentaba quemaduras en el 70% del cuerpo, con zonas de gravedad variable. Fue intubado, recibió asistencia respiratoria mecánica y se gestionó su derivación a Córdoba”, detalló el director del hospital, Adolfo Guardo.
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Según el informe oficial de los Bomberos Voluntarios de Villa Yacanto, la rápida acción de los vecinos fue clave para evitar que el fuego se extendiera a los terrenos aledaños.
El caso está siendo investigado por la Fiscalía de Primer Turno de Río Tercero, a cargo de Paula Bruera, quien ordenó pericias de Bomberos y Policía Judicial para determinar el origen del siniestro.
Murió un directivo de la Bolsa de Comercio de Rosario: el comunicado de la entidad
Quirici era secretario de la Bolsa de Comercio de Rosario y llegó a ser vicepresidente 2º de la entidad, además de desempeñarse como tesorero del Centro de Corredores de Cereales de Rosario.
La noticia del incendio que le provocó la muerte generó fuerte conmoción en la ciudad santafesina. La Bolsa de Comercio compartió un sentido mensaje dando a conocer el fallecimiento.
“Marcelo dejó una huella imborrable en nuestra institución y en cada una de las entidades en las que participó con entrega y pasión”, expresaron. En el comunicado además destacaron: “Leal, amiguero, generoso, siempre con una ocurrencia a mano, tenía el don de construir puentes, de sumar ideas y de encontrar la palabra justa para alentar y acompañar. Su optimismo y espíritu conciliador fueron permanentemente un faro en nuestra comunidad”.
"Padre orgulloso de tres hijos y flamante abuelo, su familia fue en todo momento su mayor alegría y el motor de su vida. Nos quedamos con su ejemplo, con su amistad y con la gratitud infinita hacia un hombre que dedicó su tiempo y compromiso a esta casa, sus mercados, y a todos los que tuvimos el privilegio de compartir camino con él. Acompañamos a su familia y amigos en este momento de profundo dolor y honramos su memoria con el cariño y respeto que supo ganarse. Hasta siempre Marcelo, infinitas gracias", concluye.
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