El resfrío común es una enfermedad infecciosa que afecta principalmente las vías respiratorias superiores. Es una condición muy común que suele aparecer con mayor frecuencia durante la temporada invernal, aunque el clima frío en sí no es la causa determinante de su aparición. El resfrío provoca un alto índice de ausentismo escolar y laboral, así como una demanda significativa de consultas médicas.
Causas y propagación del resfrío común
El resfrío común es causado por una variedad de virus que se encuentran en el ambiente y se transmiten de persona a persona. Estos virus se diseminan cuando una persona afectada tose, habla o tiene contacto directo con otra persona en su entorno. Hay más de 200 virus diferentes que pueden causar el resfrío, lo que significa que es posible tener más de un episodio de resfrío en un año debido a diferentes agentes infecciosos.
Síntomas y duración
Los primeros síntomas del resfrío, como picazón en la garganta, congestión nasal, estornudos, tos, dolor de cabeza, fiebre moderada, cansancio y dolores musculares, generalmente aparecen dos o tres días después de la exposición al virus. El período de mayor contagio suele ser durante los primeros cuatro días, y aunque algunos resfriados pueden durar hasta dos semanas o más, la mayoría desaparece en aproximadamente una semana.
Tratamiento del resfrío común
Dado que hay numerosos virus que pueden causar el resfrío común, no existe una vacuna para prevenirlo. Sin embargo, hay medicamentos disponibles que pueden aliviar los síntomas y reducir su intensidad. Además de los medicamentos, se pueden seguir algunas recomendaciones para tratar el resfrío:
1. Mantener una hidratación adecuada, especialmente en niños y personas mayores.
2. Evitar actividades extenuantes y descansar lo suficiente.
3. Mantener un entorno confortable, con una temperatura agradable y una buena ventilación.
4. Elevar la cabecera de la cama para reducir la tos nocturna y mejorar la respiración.
Medidas de prevención del resfrío común
Para evitar el contagio del resfrío, se deben adoptar ciertas medidas preventivas:
1. Mantener distancia de personas que estén fumando o tengan síntomas de resfrío. Las partículas virales pueden viajar hasta 3,7 metros a través del aire cuando una persona resfriada tose o estornuda. Además, el humo del tabaco puede irritar las vías respiratorias y empeorar los síntomas.
2. Lavarse las manos con frecuencia y de manera adecuada, especialmente después de sonarse la nariz.
3. Cubrirse la nariz y la boca al toser o estornudar, preferiblemente con un pañuelo desechable o con el codo.
4. Evitar compartir toallas, utensilios o vajilla con personas resfriadas.
5. No beber de la misma taza, lata o botella que otras personas, ya que no es posible saber si están a punto de contraer el virus.
6. No usar pañuelos usados por otras personas.
Complicaciones y consulta médica
Durante el curso del resfrío, pueden presentarse complicaciones como sinusitis, otitis, tonsilitis o el agravamiento de enfermedades respiratorias crónicas preexistentes. Si los síntomas empeoran en lugar de mejorar, es importante buscar atención médica de inmediato.
Es fundamental tener en cuenta que, tanto para la gripe como para el resfrío común, los antibióticos no son eficaces ni están indicados, ya que estas enfermedades son causadas por virus y no por bacterias.