El 16 de octubre se celebra el Día Mundial de la Alimentación y es una ocasión clave para realizar un llamado de atención a la mala alimentación y los problemas que esta genera en el sistema inmunológico en tiempos de pandemia por COVID-19. Especialistas del Hospital de Clínicas advierten sobre los reiterados malos hábitos a la hora de comer y sobre los diferentes alimentos que se pusieron de moda como la quinoa, los arándanos, la chia o la maca. ¿Qué proponen? Que todos y todas lleven adelante, a lo largo de su vida, una dieta variada.
Más allá de los consejos, para mantenerse saludable, es importante destacar una cifra más que preocupante: en nuestro país, solo 6 de cada 100 personas consume las cinco porciones diarias recomendadas de fruta y verdura; mientras que, por otro lado, el consumo de sal duplica lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). "Constantemente surgen alimentos de moda, este fenómeno se puede dar por creencias culturales, nuevos hallazgos científicos de beneficios para la salud o como resultado del marketing de la industria alimentaria", expresa la licenciada Alexa Gómez.
Entre los grupos que destaca, aparecen los "súper alimentos" -término acuñado por el médico Steven Pratt-. Sobre esto, la Jefa de Residentes del Departamento de Alimentación y Dietética del Clínicas explicó: "La connotación de la palabra súper sugiere que sobresalen con respecto a otros alimentos. Algunos de ellos son: arándanos, bayas de goji, frutillas, ajíes, ajo, jengibre, chía, lino, quinoa, cacao, maca, espirulina, pasto de trigo, acai y polen, entre otros". Pero, ante los estudios científicos, se observa que quedan afuera otros alimentos saludables e importantes como las frutas, verduras, cereales y legumbres.
Más allá de los alimentos que quedan afuera, Gómez sostiene: "Otro punto a tener en cuenta es que algunos de los alimentos mencionados como súper alimentos, no son de consumo habitual en nuestra población, no se producen de forma local y por eso presentan precios elevados", algo que lógicamente dificulta su consumo. Algunos pueden aportar sabor a las preparaciones, otros vitaminas y minerales o fibra. Pero aclara: "Eso no significa que no podamos reemplazar estos alimentos por otros productos locales, accesibles y cuyo consumo nos sea familiar".
Frente a la alimentación relacionada con los "súper alimentos", la licenciada deja en claro que "es importante no pensar que el consumo de un único alimento puede tener beneficios para la salud" y manifiesta es clave contemplar a la alimentación como un todo y atravesada por una mayor variedad en el consumo. "No hay un alimento mágico pero la suma de hábitos alimentarios saludables puede ayudarnos a mantener la salud y prevenir la aparición o progresión de enfermedades crónicas no transmisibles como el sobrepeso, la obesidad, la diabetes y la hipertensión arterial", advirtió.
Uno de los ejemplos sobre los que se expresó fue la quinoa, que puede servir como reemplazante de otros cereales como el arroz. A la hora de cocinar y consumirla, remarcó la importancia de lavar bien dicho pseudocereal mientras que destacó que puede mezclarse en ensaladas, quinoa con vegetales y pollo, como relleno de vegetales y en hamburguesas a base de plantas. También abogó por la utilización del ajo para darle sabor a preparaciones como la pasta de garbanzos o “hummus”, salsa pesto, salsa de tomate casera y vegetales al horno. "Mediante este tipo de alimentos se puede buscar controlar la cantidad de sal que le agregamos a las comidas, ya que en Argentina el consumo promedio por persona es de más del doble de lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud", agregó. Mientras que, por otro lado, pidió "tener cuidado" con las recomendaciones sobre alimentos que mejoran las defensas especialmente en pandemia. "Una alimentación variada que incluya todos los grupos de alimentos como lo proponen nuestras Guías Alimentarias para la Población Argentina es la más recomendada", sentenció. Entre ellos menciona la importancia de las frutas y verduras para que el sistema inmune tenga un funcionamiento adecuado.
Las dietas de moda: ¿sirven o no?
Con respecto a este tema, Alexa Gómez remarca que no todas las dietas de moda están adaptadas al individuo que las lleva a cabo y a períodos de restricción de alimentos que tienen un principio y un fin. "Desde el Departamento de Alimentación del Hospital de Clínicas trabajamos en elaborar en conjunto con los pacientes planes de alimentación saludables que les permitan modificar hábitos, contribuyendo a mantener una alimentación saludable a largo plazo", aclarando que estos planes están adaptados a cada persona.
Por otro lado, sobre la alimentación a nivel poblacional en el país, según las encuestas nacionales, se observa un bajo consumo de frutas y verduras como máxima problemática de la mayoría de los argentinos y las argentinas. "Una alimentación que incluya por lo menos cinco porciones entre frutas y verduras va a tener beneficios para la salud ya que nos aportan vitaminas, minerales y fibras que contribuyen con el cuidado de nuestra salud y tratamiento de enfermedades. Sin embargo, solo 6 de cada 100 personas cumplen con esta recomendación en nuestro país", sostuvo.
Por último, la licenciada se refirió a los precios de los llamados "súper alimentos" - que suelen ser importado y se transforman en un gasto extra- y destacó, en cuanto a frutas y verduras, que se puede consumir aquellas que estén en estación. "La recomendación del Departamento de Alimentación y Dietética va a ser evitar el consumo de alimentos de moda o que tenga publicidad que promete beneficios importantes para la salud, sin antes consultar a un licenciado en nutrición. De esta manera podemos evitar generar gastos innecesarios, tener una alimentación equilibrada y adecuada a nuestras necesidades nutricionales individuales. Una alimentación variada que incluya alimentos de todos los grupos y asegure un adecuado aporte de fibra aumentando el consumo de frutas y verduras crudas favorece la salud y la prevención de enfermedades crónicas no transmisibles", cerró.