En días en que las altas temperaturas siguen siendo noticia estar expuestos por un tiempo prolongado al sol o realizar actividad física en ambientes calurosos o con poca ventilación puede acarrear un golpe de calor. Si bien varios de sus síntomas coinciden con los del coronavirus, especialistas del Hospital de Clínicas lo definen como el aumento de la temperatura corporal debido a la dificultad para regularla a través de mecanismos habituales como la sudoración.
¿Cuáles son sus síntomas del golpe de calor?
- Sed intensa
- Fiebre y sensación de calor sofocante
- Resequedad en la piel
- Agotamiento
- Mareos y/o desmayos
- Calambres
- Dolor de estómago, náuseas y vómitos
- Dolor de cabeza
- Desorientación
¿Cómo diferenciar un golpe de calor del coronavirus?
El calor extremo puede amenazar a cualquiera, pero muchos de los mismos grupos que corren el mayor riesgo de contraer una enfermedad grave a causa del coronavirus también son los grupos más vulnerables a la exposición al calor. "A medida que aumenta la edad, las personas se vuelven menos susceptibles a regular la temperatura y tienen problemas con el calor en verano", puntualizan los especialistas.
Sin embargo, teniendo en cuenta los síntomas del golpe de calor, pueden surgir otros que hagan temer de una infección por coronavirus. A diferencia del golpe de calor, el virus COVID-19 suma otra serie de síntomas propios para tener en cuenta:
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Pérdida del olfato y del gusto
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Tos y dificultad para respirar
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Dolor de garganta
Mantener el uso de tapabocas
Según los profesionales del Hospital de Clínicas, el uso de barbijo durante nuestras tareas habituales no incrementa de manera significativa la demanda fisiológica de oxígeno. Pese al calor, es necesario mantenerse con el tapabocas colocado para prevenir contagios
De esta manera, si se respetan las recomendaciones generales para evitar un golpe de calor, el uso de tapabocas no generaría inconvenientes en nuestra salud.
Recomendaciones generales para prevenir el golpe de calor:
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Hidratación: ingesta de líquidos, en especial 2 litros de agua, durante todo el día
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Alimentación hipocalórica: optar por la frutas y verduras y evitar comidas pesadas y de lenta digestión
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Uso de ropa clara y fresca, en especial ropa de algodón, evitando las prendas de nylon o poliéster
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Uso de gorras o sombreros frescos a la hora de transitar en horas de sol a fin de proteger la cabeza
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Evitar las horas de mayor calor para realizar actividad física o exponerse al sol
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Permanecer en espacios y ambientes ventilados tanto para realizar tareas habituales como para realizar ejercicios.
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El uso de ducha diaria con agua templada es recomendable a fin de reducir el calor corporal y remover la sudoración presente en la piel.
Por último, coinciden en que tanto para el golpe de calor como para el coronavirus, lo más importante es la prevención.
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